FUNDAMENTOS DE LA

 

LEY 11806

 

 

CREACIÓN DEL PUERTO MILITAR.

 

En el año 1883 las necesidades estratégicas de nuestra Armada alentaron el estudio de la construcción de un puerto militar, en el lugar de nuestro litoral marítimo, que se considerara como más conveniente.

Con tal motivo se efectuaron distintos estudios hidrográficos, siendo los realizados por el capitán de navío Félix Dufourq los que determinaron que la zona de la Bahía Blanca era la más favorable para el emplazamiento del puerto militar.

Se optó por Puerto Belgrano debido a su capacidad y al abrigo de su fondeadero natural, la bondad y la gran extensión de su terreno y de sus playas, que permitían proyectar y ejecutar las obras con amplitud, sin interferencia de intereses privados ni problemas de otra magnitud.

El Estado Mayor de la Armada de aquella época, una vez que fijó el emplazamiento de la base, pasó al estudio técnico del proyecto para cuyo perfeccionamiento fue llamado al país el ingeniero Luis Luiggi.

El mencionado profesional, de nacionalidad italiana, experto en la materia, presentó sus planos y presupuestos (unos cuatro millones de pesos oro). Luego de pasar a estudio del Congreso nacional, el 30 de noviembre de 1986 se sancionó la Ley 3450 de carácter secreto correspondiente a la creación del puerto militar, firmada por el entonces Presidente de la Nación, don José Evaristo Uriburu.

 

TRANFORMACIÓN DEL VIEJO PAISAJE DESERTICO.

 

El 2 de agosto de 1987 se llamó a licitación internacional ordenada por el Poder Ejecutivo nacional y entre las cinco firmas de fama mundial que se presentaron, fue adjudicada a la empresa Dirks Dates y Van Hattem.

Las construcciones proyectadas fueron elevándose con asombrosa tenacidad y se entregaron en un plazo de treinta meses.

El 2 de julio de 1989, se colocó el primer pilote del dique de Carena, como inicio de las obras, marcando un hito en la historia de la región. Esta fecha también se adoptó años más tarde como la correspondiente a la fundación de la ciudad de Punta Alta.

Hoy pujante ciudad cabecera del distrito Coronel de Marina Leonardo Rosales, que nace como consecuencia lógica de la decisión política adoptada por nuestro gobierno nacional, en la búsqueda de acrecentar nuestra soberanía en el mar argentino y en nuestras costas patagónicas.

La misma ley incluía la construcción de obras fijadas de defensa costera, tarea que se inició en 1898 finalizando las cinco baterías proyectadas en el tiempo record de treinta y seis meses. La inauguración producida el 17 de mayo de 1901, contó con la presencia del Presidente de la Nación, don Julio Argentino Roca y otras altas autoridades nacionales.

Junto a los primitivos galpones para alojamiento del personal y resguardo de materiales, como así también los primeros muelles para buques pequeños, fueron surgiendo la amplia dársena, los grandes talleres, los numerosos edificios oficiales, y obras complementarias de canales, antepuertos, muelles, casa de bombas, telégrafo, teléfono, correo, hospital, iglesia, hotel, los barrios del personal militar, que transformaron profunda y favorablemente el viejo paisaje desértico.

El nombre de puerto militar subsistió hasta 1923, año en que por decreto del gobierno nacional se cambió por el de Puerto Belgrano, respetando así la tradición del nombre que figuraba en las antiguas cartas náuticas.

 

LA BASE NAVAL PUERTO BELGRANO.

 

La base naval Puerto Belgrano, cobija en su seno a la Flota del Mar, su razón de ser y receptora de sus esfuerzos. El desarrollo y modernización, a través del tiempo, de las naves de guerra ha marcado la pauta y el ritmo de su crecimiento.

Su creación se tornó imprescindible con la construcción de las primeras grandes unidades en Italia, tales como los cruceros, acorazados Garibaldi, General San Martín y Pueyrredón, durante la última década del siglo pasado.

El buque General San Martín inauguró en 1902, el gran dique de carena. Los grandes acorazados Moreno y Rivadavia, debido a la nueva tecnología que aportaban, dan un vuelco fundamental al sostén logístico que la base naval debía prestarles.

La década del 30, con los destructores clase Buenos Aires, propone una nueva transformación de los medios y servicios, que continúa con la incorporación y posterior de destructores más modernos y fundamentalmente los portaaviones Independencia y 25 de Mayo.

La aparición de unidades de alta tecnología, como los destructores tipo Meko y tipo Sheffield, generaron la aparición de nuevos talleres especializados para su atención.

Actualmente abarca una superficie de más de 18.600 hectáreas y es sede del Comando del Área Naval Atlántica.

 

LA NECESIDAD DE UN ARSENAL NAVAL.

 

Al quedar inaugurado el 2 de enero de 1902, el primer dique seco de carena, surgió la necesidad natural de montar instalaciones para los talleres que habrían de encargarse de los trabajos que requerirían los buques que llegaran a las gradas de dicho dique. Principalmente los pertenecientes a la entonces incipiente flota de mar.

De esta manera surgió lo que hoy se llama Arsenal Naval Puerto Belgrano, integrado por los departamentos Talleres Generales, Taller de Armas navales, Taller de Óptica y Control Tiro, Talleres de Electrónica. Taller de Instrumental, Taller de Misiles, Taller de Equipos Eléctricos Especiales, Polvorines, Estación de Experiencias, Capacitación Técnica entre otros, conformando un conjunto de capacidades diversas que tienen a su cargo la responsabilidad de mantener y reparar los distintos ubiques de la flota y asegurar a los hombres de mar, el zarpar, navegar, operar y volver a tomar puerto sin dificultades.

Si bien la principal actividad se centra en la flota de mar, los servicios que brindan los diques de carena 1 y 2, verdaderas obras de ingeniería para la época en que fueron construidos, son utilizados por buques mercantes de compañías estatales y privadas, nacionales y extranjeras y empresas no necesariamente navieras.

 

OTRAS DEPENDENCIAS DE LA BASE NAVAL.

 

La base naval de Puerto Belgrano también cuenta con otras dependencias tales como Servicios Eléctricos, Servicios Marítimos, Servicios de Máquinas, Instalaciones Fijas, Alcaldía, intendencia, Suministros.

También tienen su asiento las escuelas de capacitación para personal militar superior y subalterno, el Hospital Naval, el Centro de Incorporación y Formación de Marineros, el Batallón Seguridad, la Policía de Establecimientos Navales, el hotel para oficiales, la casa de jefes y oficiales, la parroquia, el casino de suboficiales, el Registro Civil, el correo, el Museo Naval, el periódico “Gaceta Marinera”, el cine teatro Comodoro Rivadavia.

 

LA ACTIVIDAD DEPORTIVA.

 

En actividad y competencia deportiva tiene un lugar preponderante en el ámbito de la base naval, prueba de ello lo constituye el imponente estadio de deportes y los campos deportivos ubicados en distintos sectores, donde se pueden practicas disciplinas como golf, tenis, polo, pelota a paleta, fútbol, básquet, hipismo, yachting, etcétera.

 

VIVIENDAS.

 

A fin de brindar alojamiento al personal militar y sus familiares, la Base Naval Puerto Belgrano cuenta con numerosas viviendas distribuidas en diferentes barrios que albergan a más de 1790 familias.

Que todo lo expuesto sirva como antecedente en razón del cual solicitamos al Honorable Cuerpo, la aprobación del presente proyecto de ley.