DECRETO 2923/49

 

Departamento de Salud Pública y Asistencia Social.

 

LA PLATA, 17 de FEBRERO de 1949.

 

CONSIDERANDO:

 

Que la Ley 5.376 sancionada por la Honorable Legislatura con fecha 23 de Octubre de 1948 y promulgada por Decreto número 27.841 de fecha 20/11/48, establece las disposiciones a que se ajustará la provisión de agua, en los lugares de la Provincia donde no existan servicios de agua corriente;

 

Que con el propósito de cumplimentar lo dispuesto por el artículo 16 de la Ley de referencia y a fin de fijar normas para que se lleven a cabo integralmente en la práctica las finalidades sani­tarias perseguidas, por la Ley, corresponde dotar a la misma de la reglamentación respectiva;

 

Que el anteproyecto elevado por el Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social, responde a los propósitos perseguidos.

 

Por ello,

 

EL GOBERNADOR DE LA PROVINCIA DE BUENOS AIRES

 

DECRETA:

 

ARTICULO 1.- Apruébase la «Reglamentación de la Ley 5.376» cuyo texto obra agregado de fojas 2 a 46 (*).

 

ARTICULO 2.- El presente Decreto será refrendado por los señores Ministros de Salud Pública y Asistencia Social y de Obras Públicas.

 

ARTICULO 3.- Comuníquese, publíquese, dése al Registro y “Boletín Oficial” y archívese.

 

(*) Ver texto a continuación.

 

 

 

REGLAMENTANDO LA LEY Nº 5.376 QUE FIJA LAS DISPOSICIONES A QUE DEBERA AJUSTARSE LA PROVISION DE AGUA POTABLE Y LA ELIMINACION DE EXCRETAS EN TODAS LAS ZONAS DE LA PROVINCIA.

 

l. - Perforaciones para aprovisionamiento de agua

 

ARTICULO 1.- La perforación deberá ubicarse en el sitio más alto posible, por encima del nivel de la inundación máxima conocida.

 

ARTICULO 2.- El drenaje superficial deberá alejarse de la cabeza de bomba.

 

ARTICULO 3.- La boca del pozo no se ubicará en una excavación debajo del nivel del terreno.

 

ARTICULO 4.- Deberá evitarse la proximidad de toda fuente de con­taminación, debiendo las cañerías cloacales estar separadas del pozo por una distancia no menos de 15 metros, siempre que se usen caños cloacales extra pesados de hierro fundido con juntas tomadas con plomo.

 

ARTICULO 5.- Los retretes, corrales, charcos, lagunas y estercoleros, deben ser instalados a una distancia no menor de 15 metros y en lo posible a mayor distancia de las fuentes de agua utilizables.

 

ARTICULO 6.- Durante la ejecución de la perforación deberá ins­talarse un retrete para ser utilizado por los obreros que trabajan en la construcción.

 

ARTICULO 7.- Todo material que deba ser introducido en la perforación, como ser barro, pedregullo, encamisado, deberá ser so­metido previamente al proceso de cloración.

 

ARTICULO 8.- Se procederá al cierre por cementación de todos los estratos que pudieran llegar a ser causa de contaminación de la napa aprovechable.

 

ARTICULO 9.- Durante la ejecución de la perforación deberá em­plearse únicamente herramientas limpias, procediéndose al lavado con clorógeno de las tazas de bomba y de toda cuerda y elementos antes de su inmersión.

 

ARTICULO 10.- La colocación de la empaquetadura de pedregullo deberá emplearse éste, previo lavado con agua que contenga un tenor de cloro libre no menor de 300 miligramos por litro.

 

ARTICULO 11.- Toda inspección durante la perforación deberá eje­cutarse con material limpio.

 

II. - Encamisado

 

ARTICULO 12.- Toda perforación deberá tener su encamisado, de­biendo utilizarse para ello un material durable e impermeable. El encamisado deberá hacerse, preferentemente, hasta una pro­fundidad de 3,5 m. debajo de la vertiente de la primera napa, pero en ningún caso menos de 3,5 m. debajo de la superficie del terreno. Será perfectamente cementado.

 

ARTICULO 13.- Como material para el encamisado se usará cañería normal de acero, hierro forjado o hierro fundido. No se permitirá revestimiento de mampostería de ladrillo. Cuando se utilice caño de barro cocido, vitrificado, caño de cemento amianto, revesti­miento galvanizado para pozo o caño de metal acanalado, deberá ejecutarse un revestimiento de una pared de hormigón armado de 15 centímetros de espesor por lo menos, hasta una profun­didad de 3,5 metros como mínimo.

 

ARTICULO 14.- El espacio anular entre el encamisado y la per­foración, debe ser rellenado con un cierre hermético de cemento o arcilla pesada.

 

III. - Bombas

 

ARTICULO 15.- Para la cabeza de bomba deberá proveerse un cimiento apropiado, constituído por una plancha de hormigón ar­mado para el motor impulsor, por lo menos de 10 centímetros de espesor por encima de la rasante del suelo y de un radio de extensión de 60 centímetros, desde la boca del pozo, con pendiente suficiente para permitir el drenaje del agua alejándola de dicha boca.

 

ARTICULO 16.- Sólo será permitido como medio de extracción, bom­bas del tipo autocebadoras, debiendo proveer ventilación a la cabeza de la misma; se impedirá que se forme vacío al ser puesta en marcha, evitando así la succión de materiales contaminados a través de posibles pérdidas y la fractura del encamisado. Dicha ventilación deberá terminar en una curva U, protegida con malla 16 de alambre de latón o bronce, que impida la entrada de in­sectos, debiéndose situar por arriba del nivel del terreno, de modo que impida la entrada de polvo por succión o debido a co­rriente de aire.

 

ARTICULO 17.- La cabeza de bomba deberá ser bien ajustada a fin de evitar contaminaciones, que puedan producirse a través de las ranuras.

 

IV. - Desinfección de pozos

 

ARTICULO 18.- Ningún pozo recién perforado podrá librarse al consumo sin proceso previo de desinfección.

 

ARTICULO 19.- La desinfección de los pozos destinados al consumo como bebida, deberá realizarse periódicamente y toda vez que autoridad competente así lo ordenare.

 

ARTICULO 20.- La desinfección que determinan los artículos ante­riores, se ejecutará de acuerdo a lo que se establece en el anexo de la presente Ley.

 

V. - Aljibes

 

ARTICULO 21.- Los aljibes se construirán en albañilería u hormigón con paramentos interiores lisos, perfectamente impermeabilizados y distarán por lo menos 15 metros de cualquier sistema de tra­tamiento primario de excretas.

Serán cerrados y tendrán una boca de acceso con cierre her­mético, extrayéndose el agua mediante una bomba. El conducto que surja de agua al aljibe será de material cerámico vidriado al interior, hierro, cemento impermeabilizado, fibro cemento u otro material análogo y desembocará en una cámara o filtro de arena de 1,20 m. de profundidad con tapa y válvula de nivel constante de descarga al aljibe. La superficie del lecho filtrante se calculará a razón de 1 m. por cada 30 m. cúbicos de capa­cidad del aljibe.

 

VI. - Tanques

 

ARTICULO 22.- Los depósitos de bombeo y de reserva, deberán ser construídos de material que no altere la calidad del agua; serán cerrados y perfectamente estancos e irán colocados en un sitio de fácil acceso, debiendo constar con los medios que permitan su inspección (escalera, etc.).

 

ARTICULO 23.- Los tanques de gran capacidad estarán divididos en dos partes iguales por medio de un tabique interior dispuesto en forma tal que resulte factible desagotar y limpiar uno cual­quiera de los dos compartimentos así formados, atendiendo al servicio con la reserva acumulada en el otro; en su defecto, deberá construirse dos o más tanques independientes.

 

ARTICULO 24.- En cualquiera de los casos señalados en el artículo anterior, las cañerías de bajada deberán construirse en forma tal que permitan cumplir sin inconveniente los propósitos anterior­mente enunciados.

 

ARTICULO 25.- Los tanques o depósitos de almacenamiento deberán estar provistos de cierre hermético debajo del nivel del agua y de modo tal que hagan fácil su limpieza.

 

ARTICULO 26.- La ventilación de todo tanque se asegurará por me­dio de un caño de 25 centímetros de diámetro ubicado en la parte superior, curvado hacia abajo y resguardado con tela metálica ade­cuada.

 

ARTICULO 27.- El extremo de alimentación llevará un dispositivo automático para impedir que el depósito pueda desbordar, así como también el agua contenida en él pueda retroceder por la cañería de subida.

 

ARTICULO 28.- El fondo tendrá pendiente adecuada hacia la salida, de manera que no pueda formar depósitos decantados y que sea factible el desagote íntegro de su contenido.

 

ARTICULO 29.- El caño de salida irá provisto de una llave de paso; adosada a la llave, entre ésta y el tanque, se colocará un ramal provisto de llave apropiada, para facilitar el rápido desagote y limpieza del tanque.

 

ARTICULO 30.- Los tanques llevarán en la parte superior una tapa de 0,25 por 0,25 m., la que será sellada y precintada por la oficina competente y sólo podrá ser abierta por el Inspector para com­probar el estado de limpieza del tanque y la calidad del agua provista.

 

ARTICULO 31.- Los tanques o depósitos de almacenamiento recién construídos, no se librarán sin ser sometidos previamente a la desinfección.

 

ARTICULO 32.- Todo tanque o depósito de almacenamiento, deberá someterse a desinfección periódicamente y toda vez que autoridad competente así lo ordenara.

 

ARTICULO 33.- La desinfección señalada en los artículos anteriores se ejecutará de acuerdo a lo que se establece en el Anexo de la presente Ley.

 

VII.- Cañerías

 

ARTICULO 34.- Ningún caño de servicio podrá ser colocado de modo que atraviese una cloaca, chimenea, albañal o sumidero, o que pase por sitio en que el agua pueda contaminarse o escaparse sin ser notada, en el caso de producirse algún desperfecto en el caño.

 

ARTICULO 35.- La cañería de impulsión de la bomba elevadora, será de hierro galvanizado, pudiendo los organismos competentes au­torizar la colocación de otro material de análoga resistencia.

 

ARTICULO 36.- Toda cañería para el servicio domiciliario será de plomo de primera calidad u otro material aprobado, y deberá estar cubierta de un revestimiento adecuado para preservarla de la acción corrosiva de los morteros de cal o cemento y de las co­rrientes eléctricas. Cuando la cañería de plomo se instale en tierra será protegida en forma adecuada para evitar su deterioro.

 

ARTICULO 37.- Ninguna instalación de provisión de agua recién construída podrá librarse al servicio sin proceso previo de des­infección de sus cañerías.

 

ARTICULO 38.- Las cañerías deberán ser desinfectadas periódica­mente y cada vez que autoridad competente así lo ordenara.

 

ARTICULO 39.- La desinfección que determinan los artículos ante­riores se ejecutará de acuerdo a lo que se establece en el Anexo de la presente Ley.

 

VIII. - Inutilización de pozos

 

ARTICULO 40.- La obturación de pozos fuera de uso se hará relle­nándolos con pedregullo o cascote hasta la parte superior o techo de la napa utilizada y después con cemento portland mojado con agua y suficientemente fluido; si hubiere cañería se la levantará al mismo tiempo. Todo el pedregullo o cascote deberá ser lavado con agua que posea un tenor de cloro libre no menor de 300 mi­ligramos por litro.

 

IX. - Cámaras sépticas

 

ARTICULO 41.- La cámara séptica debe ser construida en forma tal que permita la entrada por un lado de un flujo horizontal, lento, uniforme al través y la descarga por el otro lado con la menor alteración posible del contenido de la cámara.

 

ARTICULO 42.- La longitud de la cámara no debe ser inferior al doble de su ancho, y la profundidad mínima de líquido de 1,20 m.

 

ARTICULO 43.- Las cámaras sépticas del comercio, generalmente cilíndricas, pueden ser empleadas si ofrecen las condiciones re­queridas de funcionamiento.

 

ARTICULO 44.- La cámara séptica o cualquier otro depósito de tra­tamiento primario, deberá ser instalado a una distancia no menor de 15 m. de cualquier fuente de provisión de agua.

 

ARTICULO 45.- Los dispositivos mencionados en el artículo anterior deben estar ubicados en sitios de fácil acceso, permitiendo la ins­pección y limpieza de los mismos.

 

ARTICULO 46.- Las cámaras sépticas serán instaladas en sitios menos elevados que las fuentes de provisión de agua.

 

ARTICULO 47.- Las cámaras sépticas u otros dispositivos de trata­miento primario deberán ser construídas de hormigón armado y perfectamente impermeables.

 

ARTICULO 48.- Las cámaras serán cerradas, debiendo estar provistas de un tubo de ventilación de longitud adecuada y deberán contar con una cámara que permita su inspección y limpieza.

 

ARTICULO 49.- La llegada y salida del líquido debe hacerse por la parte superior de la cámara. A efecto de eliminar en lo posible las corrientes y remolinos, los caños de entrada y de salida serán en T o acodados hacia abajo, o bien se colocará frente a ellos sendas pantallas.

 

ARTICULO 50.- La rama sumergida de los caños en T o acodados debe tener igual sección que los caños mismos de entrada y salida a los cuales están unidos.

 

ARTICULO 51.- La pantallas deben ser de hormigón y extenderse 12 a 18 pulgadas debajo de la línea de flujo, por lo menos 6 pul­gadas encima de la misma línea y estar colocadas aproximadamente a 12 pulgadas de los extremos de entrada y salida de la cámara.

 

ARTICULO 52.- La capacidad de la cámara séptica debe ser 10 a 20 veces la cantidad de agua que diariamente reciba, es decir, será aproximadamente de 200 litros por persona; en ningún caso la cámara séptica será de menos de 2.000 litros de capacidad. En escuelas y fábricas donde los contribuyentes no permanecen el día entero, la capacidad por persona, respetando la capacidad mínima de la cámara puede ser disminuída. Para inmuebles de hasta 50 personas se adoptarán las medidas y volúmenes que se

indiquen en el Anexo Nº 3.

 

ARTICULO 53.- Para la elección del tipo de cámara séptica y su cui­dado, deberá atenerse a las condiciones que figuran en el Anexo número 2.            

 

X.- Interceptores

 

ARTICULO 54.- Se evitará que lleguen a la cámara séptica, todas aquellas materias que pueden afectar los procesos de tratamiento, a cuyo efecto, en caso de volcarse en la cámara los líquidos de lavabos, piletas, etc., se instalarán interceptores o desengrasadores. Se evitará también el desagüe en las cámaras sépticas de las aguas de lluvia y el de desinfectar inodoros con antisépticos.

XI .- Tratamiento secundario

 

ARTICULO 55.- En los suelos secos y pedregosos, la derivación del efluente de la cámara se hará por cañerías subterráneas de juntas abiertas. Necesitando de 7,50 a 12 metros de caño por per­sona, cuyos excrementos vayan a la cámara séptica; esta longitud debe ser aumentada en terrenos apretados y puede ser disminuída en terrenos arenosos. Deberán utilizarse caños cilíndricos de barro vidriado o cemento de 3 a 4 pulgadas de diámetro y longitud de un pie; en el caso de emplearse el caño común de cloaca, la cabeza del caño deberá ser colocada más lejos de la cámara.

 

ARTICULO 56.- Deberá dejarse un espacio de ¼ de pulgada entre caño y caño.

 

ARTICULO 57.- En terrenos no muy arenosos la zanja destinada a los caños se llenará con arena gruesa, pedregullo, carbón, etc., para impedir la entrada de arena fina y tierra, se protegerá la parte superior de las Juntas con papel alquitranado o trozos de caño.

 

ARTICULO 58.- La profundidad de la zanja debe ser tal que, donde la tierra debe ser arada, haya por encima del caño más de 15 pulgadas hasta la superficie.

 

ARTICULO 59.- Las cañerías deben tener declive de dos a tres pul­gadas cada 30 m. La distribución de la cañería será simple o ramificada; en este último caso éstas estarán a una distancia mínima de 3 m.

 

ARTICULO 60.- En ciertos terrenos, especialmente de greda, se co­locará por debajo de la línea de caños, otra que sirva de drenaje, pudiendo llevar el líquido a un pozo ciego; el fondo de éste no debe estar a menos de 0,60 m. de la napa freática.

 

ARTICULO 61.- A los efectos de obtener un paso intermitente del efluente a la cañería de tratamiento, podrá conectarse un sifón a la salida de la cámara séptica.

 

ARTICULO 62.- En los casos de cañería ramificada se conectará una cámara de distribución que permita enviar el líquido a una u otra sección alternativamente.

 

ARTICULO 63.- En los casos en que este tratamiento no sea posible, y sea necesario un tratamiento que asegure la inocuidad del efluente de la cámara séptica, debe instalarse un dispositivo para la cloración del mismo.

 

ARTICULO 64.- El proceso de cloración debe realizarse siempre como tratamiento secundario o final de efluentes de cámaras sépticas de establecimientos sanitarios.

 

ARTICULO 65.- Se considerará que un agua es potable cuando sus características se encuentren comprendidas dentro de los límites que se especifican en el cuadro inserto a continuación.

 

LIMITES PERMISIBLES EN UN AGUA POTABLE

 

DATOS                                                                                 MAXIMO                 MINIMO

Color                                                                                     10                               ---

Olor (Valor umbral en caliente)                                               10                               ---

Turbiedad                                                                               2                                 ---

Residuo a 105º C                                                       mg/l      2000                           ---

Dureza total (en CO3Ca)                                            mg/l      200                             40

Alcalinidad (en CO3Ca)                                             mg/l      ---                               30

Cloro libre (CL)                                                          mg/l      0,2                              ---

Cobre (Cu)                                                                 mg/l      0,2                              ---

Plomo (Pb)                                                                             mg/l      0,05                 ---

Hierro (Fe)                                                                             mg/l      0,3                   ---

Manganeso (Mn)                                                                    mg/l      0,2                   ---

Cloruros (CL)                                                                        mg/l      700                  ---

Sulfatos (SO4Na2)                                                                 mg/l      454                  ---

Fluor (F)                                                                                mg/l      1                      ---

Vanadio (V)                                                                           mg/l      0,5                   ---

Arsénico (As)                                                                         mg/l      0,15                 ---

 

Composición Bacteriológica

 

DATOS                                                                                 MAXIMO                 MINIMO

Bacterias aerobias                                                                  100 por ml

Ps. Pyccyanea                                                                        no debe contener

                                                                                              en 100 ml

Bacterias coliformes                                                                no debe contener

                                                                                              en 100 ml

 

ARTICULO 66.- Para las substancias no indicadas en el cuadro, de­berá atenerse a lo indicado en el artículo 34 del Reglamento Bro­matológico.

 

ANEXO Nº 1

 

Desinfección de pozos

 

En la desinfección se tendrá en cuenta las observaciones que se formulen y se ejecutarán de acuerdo a lo que se establece a continuación:

Desinfectante a utilizar.- Como agente desinfectante se utilizará el cloro, el que puede usarse en forma de hipoclorito de calcio.

Dosis de desinfectante.- Se aconseja una dosis de 100 p. p. m. (partes por millón-gramos, por metro-cúbico-miligramos por litro) de cloro activo, como medida de seguridad para ponerse a cu­bierto de la pérdida de concentración de la solución, al emplearlas con aguas de elevada turbiedad que interfieren la acción bactericida del cloro.

Preparación de la solución desinfectante.- Cuando se em­plean desinfectantes sólidos (cloruro de cal, hipoclorito de calcio, etcétera), conviene adoptar el siguiente procedimiento para ob­tener la solución desinfectante.

La cantidad de desinfectante se empasta con poca agua en un recipiente abierto, perfectamente limpio, desmenuzando con cuidado los trozos más grandes mediante una varilla de madera, hasta obtener una pasta suave y libre de terrones. Se agrega el resto del agua, calculada según la tabla número 1, para el peso elegido del clorógeno, agitando suavemente durante 10 a 15 minutos antes de dejar sedimentar la suspensión. Debe usarse el líquido mas limpio, que contiene el cloro, desechando el material que sedimenta en el fondo del recipiente. El desinfectante debe ser medido con una cuchara cuando se utilizan pequeñas cantidades y cuando no se dispone de una balanza. Una cuchara de mesa moderadamente cargada de cluoruro de cal, con un espesor de 2,5 cm., contiene aproximadamente 16 gramos.

En el cuadro siguiente se consignan las cantidades de hipoclorito necesarias para alcanzar una concentración de 100 miligramos por litro de cloro activo, según el diámetro de los caños y para 33 m. de profundidad. Estas cantidades son un término medio, pues puede obtenerse una desinfección adecuada con la mitad de la dosis y también aunque se emplee el doble de lo indicado no hay peligro de dañar la cañería.

 

TABLA Nº 1

(Cuadro que indica las cantidades de desinfectante a usar)

 

 

Diámetro de

la cañería

 

Litros de agua por

33 m. de cañería

Cantidad requerida por 33 m. de cañería para dar 100 mg/l

Hipoclorito de calcio

70% de cloro activo (1)

Cloruro de cal 20%

Cloro activo

 

Hipoclorito de sodio con

10% cloro activo

4 pulg.10,16cm.

246

39 gr.

140 gr.

280 gr.

6 pulg.15,24 cm.

556

85 gr.

311 gr.

622 gr.

8 pulg. 19,32 cm

988

155 gr.

484 gr.

968 gr.

10 pulg.25,40cm.

1.524

248 gr.

826 gr.

1.652 gr.

12 pulg.30,48cm.

2.230

342 gr.

1.156 gr.

2.312 gr.

(1) Se venden en el comercio con el nombre de Perolorón, caporit, H.T.H. Clorotone, etc.

 

Para otros desinfectantes cuyo tenor en cloro activo no está comprendido entre los valores anotados, se tomará una cantidad proporcional a éste contenido.

Desinfección de pozos en construcción.-

1) Al ensayarse el rendimiento del pozo, debe prolongarse el bombeo hasta que el agua salga tan clara y libre de turbiedad como sea posible.

2) Después de eliminar el equipo de bombeo, se vierte en el pozo la cantidad requerida de solución de clorógeno, lentamente y justamente antes de instalar el equipo permanente de bombeo.

La difusión del agente químico en el agua del pozo debe facilitarse introduciendo la solución de clorógeno mediante una manguera o cañería que se levante y baje alternadamente durante un cierto tiempo.

Para computar la cantidad de solución desinfectante necesaria para llenar la perforación, debe tenerse en cuenta el cono que se forma allí. Este cono es de excepción mas grande que el caño camisa, especialmente si el pozo ha trabajado forzado durante cierto tiempo. Si este fuera el caso, se aconseja agregar un volumen adicional de la solución desinfectante, suficiente como para llenar un cilindro de 2 o 3 metros de diámetro, desde el final del caño camisa hasta el fondo de la perforación.

Con esto queda asegurada, además, la desinfección de los espacios vacíos, contaminados durante la perforación o por contaminaciones que han infiltrado entre el caño camisa y la perforación.

3) Se lavan las superficies del cilindro de la bomba y el caño con la solución desinfectante inmediatamente antes de colocarlos dentro del pozo.

4) Después que la bomba ha sido colocada, se bombea agua hasta que acuse un marcado olor a cloro. Se repite este procedi­miento con intervalos de una hora, dos o tres veces.

5) Cuando la solución de cloro ha circulado completamente a través de la columna de agua y el equipo de bombeo, se man­tiene la misma por espacio de seis horas por lo menos.

6) Después de este término el agua se bombea intensamente hasta eliminar todo vestigio de cloro.

En el caso de pozos profundos con un nivel alto de agua puedo ser necesario recurrir a un método especial para introducir el agente desinfectante en el pozo, de manera de asegurar una ade­cuada desinfección del mismo en el agua del pozo. Consiste en colocar el clorógeno sólido en una corta sección de un caño, ce­rrado en ambos extremos, por tapas provistas de agujeros; una de dichas tapas debe tener fijada, además, una argolla para poder atarlo a un cable que permita subirlo y bajarlo a través del agua.

Cuando se trate de pozos o manantiales surgentes, el caño mencionado, debe ser movido para arriba y para abajo cerca del fondo del pozo, descargando allí la mayor parte del agente desin­fectante. Es obvio que en este caso no se puede mantener el cloro por espacio de seis horas, como se especificó mas arriba; no obstante, debe aplicarse suficiente clorógeno como para mantener una concentración de cloro residual de 50 mg. por litro en el agua surgente, por lo menos durante 20 minutos.

Si se dispone de sólo hipoclorito de sodio (con un 10 % mas o menos de cloro activo) en vez de clorógenos sólidos, la operación se realiza agregando la cantidad necesaria de hipoclorito en un recipiente de vidrio, lastrado, que después de cerrarlo se introduce por medio de una cuerda en la perforación, rompiéndolo por choque en el fondo de la misma.

Desinfección de pozos construidos.- Si se trata de contaminación de pozos que tienen equipo instalado, se sugieren estos otros métodos para la aplicación del cloro:

1) Si se dispone de suficiente tubo de goma, de pequeño diá­metro como para alcanzar el fondo del pozo, se agregará por dicho tubo, ubicado entre el caño camisa y el caño filtro, la solución calculada de clorógeno; luego se hace funcionar la bomba, retor­nando en lo posible toda el agua a la perforación por medio de una manguera colocada entre el caño camisa y el caño fieltro. Se hace recircular el agua hasta obtener cloro libre a la salida de la bomba; luego se cierra todo el sistema y se deja 24 horas si es posible. Después de éste se bombea nuevamente hasta la desaparición del cloro residual ensayando con ortobolidina.

2) Si el pozo es muy profundo y si además se dispone de un buen suministro de agua de otra fuente, se puede utilizar este otro método: llevar el agua del otro suministro por medio de caños o mangueras hasta la perforación; preparar la solución de hipoclorito en un recipiente de 40 a 80 litros, provisto de un sifón. Añadir el agua de la cañería dentro del pozo a un caudal determinado y agregar la solución de desinfectante de acuerdo a ese caudal, de modo que toda la cantidad de hipoclorito calcu­lada previamente sea agregada, cuando la cantidad de agua de la cañería que haya entrado en el pozo corresponda al volumen del mismo (capacidad de la perforación calculada en base al diá­metro y a la profundidad). Este método hace que el desinfectante llegue al fondo del pozo y se introduzca en los espacios vacíos del estrato acuífero. Dejar el tiempo de contacto y luego bombear igual que en el Nº 1.

3) Otro método fácil, pero que no asegura una cloración hasta el fondo del pozo, es el siguiente:

Si la perforación tiene una turbina o centrífuga del tipo em­pleado en pozos profundos, se coloca en el caño de descarga de la bomba un grifo pequeño, el cual se conecta por medio de una manguera con el recipiente de hipoclorito; luego se cierra la bomba y se abre dicho grifo y la succión producida por la columna de agua, arrastra la solución desinfectante por lo menos hasta el nivel de succión de la bomba. Este método se aplica cuando la contaminación es debida al agua que penetra a través de la abertura anular entre la camisa y la perforación.

Desinfección de pozos abiertos.- Se procede de la siguiente forma:

a) Se elimina todo equipo, materiales, plataforma, etc., que no forman parte de la instalación:

b) Se lavan las paredes interiores del revestimiento con solución de cloro, usando una escoba dura o cepillo para asegurar una limpieza perfecta;

c) Se bombea el agua del pozo hasta que salga completamente clara y se quita la bomba colocada con ese propósito;

d) Se coloca la tapa del pozo y por la abertura de la misma se vierte en él la cantidad requerida de solución de cloro, antes de colocar el cilindro de la bomba. Debe distribuirse la solución de cloro, sobre la mayor superficie de agua posible, para obtener una adecuada difusión del cloro en el agua del pozo;

e) Se lava la superficie exterior del cilindro de la bomba y el caño con la solución de clorógeno inmediatamente antes de colocarlos;

f) Después de colocada la bomba, se bombea agua hasta que se note fuerte olor a cloro;

g) Se deja actuar la solución de cloro por lo menos 6 horas;

h) Luego de ese término se bombea el agua, hasta que la misma no acuse olor ni sabor a cloro.

Desinfección de tanques y todo depósito de almacenamiento de agua.-

Todo tanque o depósito de almacenamiento recién construido no se librará al consumo sin ser previamente sometido al proceso de desinfección.

Todo tanque o depósito de almacenamiento deberá someterse al proceso de desinfección periódicamente y toda vez que autoridad competente así lo ordenare. En la desinfección se tendrán en cuenta las observaciones que se formulan y se ejecutará de acuerdo a lo que se establece a continuación:

Para los depósitos accesibles a la persona que los ha de limpiar y desinfectar, se sugieren las siguiente normas:

a)      Vaciarlos completamente;

b)      Cepillar y rasquetear las paredes, tapa y fondo, y luego lavar con abundante agua, desaguando simultáneamente hasta eliminar toda suciedad;

c)      Dejar secar y aplicar a las paredes, tapa y fondo, un blanqueo con cal;

d)      Una vez seco el blanqueo podrá ponerse en servicio el depósito.

En los casos de reservas o tanques que no puedan quedar fuera de servicio mucho tiempo, no permitiendo aplicar el blanqueo con cal, debe procederse de ésta forma:

a) Vaciarlo parcialmente (que quede 10 a 20 cm. de agua);

b) Rasquetear y cepillar las paredes y tapa con una solución de clorógeno que contenga 100 mg/l de cloro;

c) Agregar suficiente clorógeno al agua que ha quedado en el depósito como para obtener una concentración de cloro de 50 mg/l., y una vez bien mezclada, dejarla actuar por lo menos durante 3 horas;

d) Eliminar el agua remanente y luego lavar con abundante agua del sistema de provisión, desaguando simultánea­mente.

En esta última operación, el personal encargado de realizarla no debe estar en el interior del depósito. Luego ponerse en servicio.

 

Desinfección de cañerías.- Toda instalación de agua recién efectuada, no podrá librarse al servicio sin proceso previo de desinfección de sus cañerías.

Las cañerías deberán ser desinfectadas periódicamente y toda vez que autoridad competente así lo ordenare.

En la desinfección se tendrán en cuenta las observaciones que se formulan y se ejecutará de acuerdo con lo que se establece a continuación:

Se llenarán éstas, por medio del tanque de distribución de agua, con solución de clorógeno que contenga 300 mg/l de cloro libre, lo cual se obtiene agregando 150cc. de solución de hipo­clorito de sodio (con 10 % más o menos de cloro libre) a 50 litros de agua. Se mantiene llenas con esta solución 3 horas. Después de este tiempo se elimina la solución de clorógeno, poniendo en servicio las cañerías y dejando correr el agua hasta que no acuse reacción positiva del cloro libre con el reactivo de la ortotolidina.

La figura indica la forma práctica de efectuar esta operación. Mediante una hoja de papel, que se dobla en forma de embudo, se coloca a través de la férula. A una cantidad de clorógeno su­ficiente como para que una vez llena la cañería a desinfectar, resulte una solución de 300 mg/l.

Luego se abre la válvula Nº 1, dejando pasar el agua en cantidad suficiente para llenar parcialmente el conducto y final­mente la Nº 2, para llenado en su totalidad. Después de 2 ó 3 horas se elimina la solución de clorógeno a través de la férula A abriendo la válvula Nº 2 hasta la desaparición de la reacción de cloro libre con ortotolidina.

 

Cloración del agua de consumo.- Las aguas que deben so­meterse al proceso de cloración para asegurar su inocuidad, lo harán por cualquier medio que permita el agregado de los cloró­genos en proporciones tales que se obtengan cantidades de cloro libre que aseguren la potabilidad del agua y las que para tal fin aconseje la autoridad competente.

 

Tratamiento del agua de consumo cuando exista tanque de alma­cenamiento o de cualquier depósito, cuando no posee equipos cloradores.-

Debe agregarse la cantidad de clorógeno necesaria para que después de media hora de contacto y al final de la cañería, en agua acuse aún vestigios de cloro libre con el reactivo de la Ortotolidina.

 

Modo de llevado a cabo.- Agregar 2 cc. de la solución de hipoclorito de sodio (con el 10 % más o menos de cloro libre) o su equivalente de cualquier clorógeno, por cada 1000 litros de agua, asegurando la mezcla por agitación enérgica. Para hacer más factible el agregado, conviene preparar una solución de cloró­geno al 2 % de cloro libre, para lo cual se mezclarán con 10 litros de agua, dos litros de hipoclorito de sodio o con su equivalente de cualquier clorógeno. De esta solución se agregará 1 litro a cada 100 metros cúbicos del agua a tratar. Después de media hora de contacto y al final de la cañería, el agua tratada debe con­tener: 0,1 a 0,05 miligramos por litro o vestigios de cloro libre.

Si la dosis indicada anteriormente no diera el resultado men­cionado, deberá aumentarse o disminuirse la cantidad hasta ob­tenerlo, para lo cual se procederá a agregar 2-3-5, etc. litros, hasta obtener las cifras que se indiquen en los protocolos de análisis y observaciones que se formulen.

 

Observaciones.- Si se usara hipoclorito de calcio sólido (Per­clorón) o cualquier otro clorógeno sólido, deberá conocerse el tenor de cloro libre capaz de suministrar y de acuerdo con ello hacer el cálculo teniendo en cuenta que la demanda de cloro es generalmente de 0,5 a 2 mg. por litro; al cabo de media hora y al final de la cañería, deberá tener de 0,1 a 0,05 miligramos por litro de cloro libre ó vestigios del mismo.

El cuadro Nº 2 aclara la manera de efectuar la solución al 2 % para distintos porcentajes de cloro activo del clorógeno y la cantidad de esta solución que se debe agregar según la dosis.

Control de cloro libre.- Se usará solución de ortotolidina al 1/1000 en un tubo de ensayo se colocan 10cc. del agua en examen y se agregan 5 o 6 gotas de la solución de ortotolidina, manteniéndolo en la oscuridad. Transcurridos 10 minutos, se observa la coloración que adquiere el agua, pudiendo suceder:

a) El agua se mantiene incolora; no tiene cloro libre;

b) Se torna ligeramente amarillenta: contiene vestigios de cloro;

c) Adquiere una coloración amarilla intensa o rojiza: con­tiene exceso de cloro libre.

 

Dosaje del cloro libre o residual.- Debe llevarse a cabo con el método de la ortotolidina con el comparador, siempre que se tenga el aparato necesario. El control de cloro libre se llevará a cabo varias veces al día para el agua de provisión.

 

Cómo debe conservarse el clorógeno.- Debe ser colocado en lugar fresco al abrigo de la luz y en recipiente cerrado que no permita la llegada de la humedad ambiente, para evitar su hidra­tación y debe ser su naturaleza tal que no sea atacado por el mismo.

 

Cómo puede aumentar la inyección de clorógeno cuando existe equipo clorador.-

La inyección de clorógeno al agua tratada puede aumentar de dos maneras: elevando la aguja del flotador, aumentando la ascensión del émbolo o haciendo más concentrada la solución del clorógeno que se inyecta.

 

TABLA Nº 2

 

Cloro activo del Clorógeno

 

Peso (3)

Volumen en (m1) de solución al 2% que debe inyectarse a 100 m3 de agua para que la dosis sea (en mg/l)

%

 

0,05

0,10

0,15

0,20

0,25

0,30

0,50

1,0

40

500

250

500

750

1000

1250

1500

2500

5000

(l) 50

400

250

500

750

1000

1250

1500

2500

5000

60

330

250

500

750

1000

1250

1500

2500

5000

70

290

250

500

750

1000

1250

1500

2500

5000

20

1000

250

500

750

1000

1250

1500

2500

5000

(2) 25

800

250

500

750

1000

1250

1500

2500

5000

30

650

250

500

750

1000

1250

1500

2500

5000

35

570

250

500

750

1000

1250

1500

2500

5000

(4) 10

2000

250

500

750

1000

1250

1500

2500

5000

 

(1) Hipocloritos de calcio (Perclorón, Chlorotone, etc.)

(2) Cloruros de cal (semihipocloritos).              

(4) Peso de clorógeno a disolver en 10 litros de agua para hacer una solución al 2%.

Productos clorados o solución al 10%.

 

ANEXO Nº 2

 

Elección del tipo adecuado de cámara séptica

 

 La elección del tipo adecuado obedece siempre a factores lo­cales entre ellos pueden citarse los siguientes:

a) Volumen de los líquidos crudos a tratar, en relación con volumen del curso de agua receptor o permiabilidad del terreno;

b)............ de los líquidos según su origen ( domésticos,  .............., de hospitales comunes o de infecciosos, etc.);

c)............. de las perforaciones un otras fuentes de abastecimiento de agua y posibilidad de contaminación bacteriológica;

d) Destino a darse al liquido tratado, contemplando la po­sibilidad de someterlo ulteriormente a un tratamiento se­cundario (por medio de lechos biológicos de los tipos: arena, de contacto, percoladores, sumergidos, oxidantes cerrados, fangos activados, etc.);

e) Posibilidad de tener que efectuar posteriormente la des­infección final (cloración, ozonización, etc.);

f) Espacio disponible para la plaza de tratamiento, inclu­yendo también la playa de secado de Iodos;

g) Facilidad y medios disponibles para efectuar las extrac­ciones de lodos mineralizados y vaciados totales de las cámaras sépticas, pozos negros, etc.;

h) Densidad, ubicación y distancia a las plantas urbanas o centros de población;

i) Carácter de la población a tratar respecto a la duración probable de la planta de tratamiento (obras de carácter permanente o provisorias);

j) Posibilidad de evacuar los efluentes a futuras colectoras a cargo de otras reparticiones.

 

Cámara decantadora vertical .

 

Aconséjase tipo llamado cámara decantadora vertical (Tra­vis, Imhoff o Emscher, Oms, Steglau o similares) para los casos en que se impone obtener líquidos tratados con una demanda de oxígeno mínimo, que permite la aplicación de tratamientos, secundarios sin inconvenientes y a un costo comparativamente reducido.

 

Cámara séptica común.

 

Se cuidará la puesta en marcha y el funcionamiento de la cámara séptica. Antes de comenzar el funcionamiento debe llenarse la cámara con agua limpia, y a los efectos de obtener mayor proceso digestivo se agregará la cantidad de cal  en forma de lechada, que se indica en el cuadro.

 

Dosajes de cal

(Unicamente para cloacas de tipo doméstico)

 

CUADRO Nº 1

Cámaras sépticas comunes

 

Volumen m3                                            Kilos de cal

2,50                                                          16

5,00                                                          23

12,50                                                        35

15,00                                                        42

20,00                                                        50

40,00                                                        75

60,00                                                        100

75,00                                                        120

100,00                                                      130

150,00                                                      150

200,00                                                      180

300,00 doble                                            290 (1)

 

(1) Cuando se habilite una sola sección deberá agregarse solamente 145 kilos de cal.

 

Cuando la puesta en marcha se realiza después de la limpieza con lavado total se prescinde de la cal y se reemplaza con el agregado de un 10 % de los lodos extraídos.

 

Precauciones Generales

 

Si las condiciones de ventilación no fueran satisfactorias por acusar obstrucciones, cambios de cotas de nivel en los orificios de aireación, modificaciones en los recorridos, etc., deberá abste­nerse de producir combustiones, próximas a estos conductos o rejas de ventilación, aireación o aspiración, ventílelas, etc., y particularmente en las inmediaciones de la cámara.

Al efectuarse la limpieza de la cámara séptica deberá sacarse previamente las tapas de acceso y dejarse transcurrir por lo menos un día, para dejar en libertad los gases que hubiese acu­mulado; para iluminar el interior se prescindirá de las lámparas a petróleo o carburo o de velas, que pueden provocar explosiones, en caso de que no fuera posible emplear otro medio, deberá ha­cerse después de pasar el período de ventilación aconsejado.

En lo relativo al buen funcionamiento es de suma impor­tancia evitar el ingreso de todas aquellas materias capaces de producir obstrucciones o entorpecer los procesos inherentes a la cámara.

Por tal ,causa la limpieza y el buen estado de conservación de todos los elementos de pretratamiento (interceptores, decanta­dores, etc.) deben ser motivo de una vigilancia sistemática.

Los lodos mineralizados y costras extraídas de la cámara sép­tica no deben ser arrojados a los pozos negros o cursos de agua, si se carece de playa de secado de lodos o lugar apropiado, deben ser enterrados o alejados del lugar.

A las materias grasas o combustibles extraídas de los in­terceptores, debe dárseles igual destino. Los ácidos o cáusticas después de habérseles diluido o neutralizado, deben ser elimi­nados en forma ,independiente, es decir, que aún después del pre-tratamiento no deben ser enviados a las cámaras sépticas, para evitar el riesgo de alterar la vida bacteriana, según sea su grado de concentración.

Debe inspeccionarse con frecuencia el líquido efluente tra­tado, para imponerse de la calidad del mismo, con el objeto de determinar correctamente la periodicidad de la limpieza y evitar la obstrucción de las cañerías de evacuación. El efluente debe mantenerse exc1usivamente líquido; si se observan materias só­lidas arrastradas por la corriente, debe procederse de inmediato al vaciado total de la cámara séptica, pues esto indica la nece­sidad de la limpieza .

Precaución de importancia es mantener el ritmo de bombeo durante la extracción de los fangos, en forma lenta, es decir, que cualquiera sea el volumen que deba retirase debe ser como máximo el equivalente al caudal que ingresa en la cámara.

La extracción rápida provoca un desnivel de la capa super­ficial, ,capaz de obstruir los conductos de salida.

Debe tenerse la precaución de verificar el espesor de la capa superficial y su estado de esponjamiento; su espesor pude de con­siderarse como índice de la actividad de la cámara. Cuando su espesor es reducido, es evidente que los procesos bioquímicos son pronunciados e inversamente demostrarán poca actividad si ésta aumenta. Cuando la cámara séptica sea doble, debe anularse una de ellas en época de servicio restringido.

 

Limpieza

 

Para facilitar la comprensión de las presentes instrucciones, dividimos la operación en dos partes; la primera consiste en la extracción de los lodos mineralizados y la segunda en la limpieza por medio, de un vaciado total.

 

Periodicidad de la extracción de los lodos y vaciado total de las cámaras sépticas

 

La frecuencia de estas operaciones no puede ser fijada con exactitud por depender de factores locales imprevisibles, entre ellos los más importantes son el sensible aumento o disminución de los aportes, paralelo al número de los habitantes y que nece­sariamente está sujeto a fluctuaciones, las que aunque no perturban los procesos desarrollados en su interior, por la tolerancia que admiten, hacen variar el volumen de la materia a extraer.

Puede variar también este volumen cuando la labor de los microorganismos se ve perturbada por ,el ingreso indebido de materias grasas, productos químicos, desinfectantes, combustibles, etcétera, por falta de artefactos que los protejan o por el mal estado del funcionamiento o por el descuido de .sus limpiezas pe-riódicas. No obstante se estima que la extracción de los lodos debe efectuarse una vez al año y la limpieza con vaciado total una vez cada cinco años, en base al dimensionamiento efectuado al proyectarla.

Extracción de los lodos de cámaras dobles y simples

 

Esta limpieza consiste en la extracción de los lodos mineralizados depositados en el fondo. Se produce de la siguiente ma­nera:

Por medio de una bomba «sapo», introduciendo el caño de pesca en la parte más profunda de la cámara. El bombeo debe hacerse lentamente, tratando de retirar los lodos en forma uni­forme.

La cámara de tamaño reducido puede limpiarse con un cu­charón grande u otro recipiente de mango largo.

No deben efectuarse remociones para evitar que con el lodo salga líquido decantado.

Debe retirarse únicamente 10 % aproximadamente de la capacidad total de la cámara.

Para esta operación no es necesario interrumpir el servicio; por el contrario, deberá llevarse a cabo en los momentos de mayor consumo de agua, coincidiendo generalmente can las horas de baño. Si no fuera posible atender la extracción en los momentos citados, deberá mantenerse en funcionamiento la cantidad de bocas proveedoras de agua necesarias para satisfacer el volumen de lodo que se extrae, es decir, que el caudal de lodo no debe ser mayor que el caudal de agua que ingrese a la cámara, para evitar que la capa superficial o costra baje su nivel normal provocando la obturación de las cañerías de efluencia.

Es importante asegurar que después de la extracción quede un 20 % del lodo digerido, por ser éste agente activo del proceso digestivo de los aportes frescos que ingresan la cámara.

El operario encargado de la extracción pronto aprenderá a diferenciar los lodos digeridos; éstos son de color marrón oscuro o negros, tanto más negros cuanto más digeridos estén. Su olor característico es parecido al alquitrán, brea o goma quemada, y tan pronto desprenden los gases que lo acompañan, no dan olores molestos de ninguna clase. El lodo bien digerido es más liviano que el agua; en consecuencia se desprende de ella por filtración, contrariamente a los lodos no digeridos.

Debe ser alcalino y secar al aire libre en cinco o seis días; una vez seco se agrieta extensamente. No debe extraerse nada de la capa superficial.

 

Vaciado total

 

El vaciado total debe hacerse cuando la parte superior estu­viera seca, es decir que hubiera perdido su estado esponjoso, di­ficultando la salida de gases.

También si el fango extraído fuera muy denso, o si a pesar de la extracción del fango ya indicada, salieran sólidos arras­trados por la corriente del líquido tratado.

 

Vaciado total de cámaras dobles

 

Cuando se trate de cámaras dobles, es preferible esperar la época de receso o de servicio restringido; debe procederse así:

1º Se deja fuera de servicio media cámara durante un mes o más si es posible, tiempo necesario para producirse un proceso de descomposición de la costra debido a la falta de aportes fresco. Esta descomposición de la. costra facilita considerablemente la limpieza.

2º Se extraen los líquidos por medio de bombas.

3º Se retiran los sólidos por medio de pala, rompiendo pre­viamente los pedazos de costra grandes que no se hubieran dis­gregado.

4º Terminada la limpieza deberá llenarse de agua agregán­dole aproximadamente 10 % de los lodos extraídos. La limpieza de la otra mitad de la cámara deberá hacerse en idéntica ma­nera, pero dejando un intervalo de tiempo aproximadamente de dos meses, tiempo que se estima necesario para. la formación de las nuevas colonias bacterianas.

Vaciado total de cámaras simples

 

Cuando se trata de cámaras sépticas simples, sin dispositivo para, desviar los líquidos, debe preferirse hacerlo en épocas de escaso servicio y durante las horas de descanso.

Deberá procederse de acuerdo a lo indicado en los apartados 2, 3 y 4 de “Vaciado total de cámaras dobles”, pero previamente deberá taponarse la ,cañería de entrada para evitar el ingreso de líquidos. Las cámaras sépticas con dispositivos para desviar los líquidos pueden vaciarse con menores restricciones respecto a las épocas y al horario, prescindiéndose naturalmente del tapón de la cañería de entrada.

 

Transporte y destino de los lodos

 

Debe tenerse presente que los lodos sedimentados y costras de las cámaras sépticas, no deben ser arrojadas a los pozos absor­bentes, para evitar que estas materias obstruyan las vías de filtración del terreno, haciéndole perder, como consecuencia, su permeabilidad.

Los líquidos, y los lodos, cuando su cantidad así lo exija, deben ser bombeados directamente al carro atmosférico o a otro medio de transporte para su desparramo en el terreno adecuado.

Los lodos sedimentados ,constituyen un abono de reconocida eficacia, cuyo poder fertilizante se aproxima al del estiércol, pero deberá exponerse, previamente extendido en las playas de secado de lodos o en cualquier terreno durante 4 ó 5 días.

Pueden ser utilizados también para relleno de terrenos bajos.

 En este período de tiempo pierden el 40 % de su peso, con­virtiéndose en un polvo de fácil manipuleo.

 

CUADRO Nº 2 - POZOS IMHOFF

 

 

Nº de personas                                     Kilos de cal

500                                                         67 

      600                                                         75

      800                                                         85

     1.000                                                       95      

      

 

 

Pozos Imhoff. Puesta en marcha

 

Como se ha indicado ya para las cámaras sépticas, deberá llenarse previamente el pozo de agua limpia y agregar la cal viva en forma de lechada, de acuerdo a las proporciones del cuadro número 2.

Estas, cantidades son aproximadas y sujetas a variación, se­gún sean las condiciones del líquido a tratar.

En caso de obtenerse los valores del pH oportunamente, de­berá aumentarse o disminuirse la dosis de cal hasta colocarse sobre el límite neutro, pero sin pasar de 8.

 

Precauciones

 

San aplicables todas las indicadas para las cámaras sépticas con la salvedad de que no debe permitirse la formación de la costra o capa superficial que caracteriza el funcionamiento de las cámaras sépticas. Esta debe evitarse. Al efecto, si hubiera ten­dencia a formarse, deberá destruirse por medio de un chorro de agua a presión o con un palo, rompiendo la en pedazos y haciendo hundir la parte flotante.

Cuando se trata de un pozo viejo y con marcada tendencia. a formarla, deberá verificarse el nivel de los lodos decantados, pues esto indicaría que han llegado a borde inferior de la canaleta de sedimentación; por lo tanto estos lados deben ser extraídos inmediatamente.

El nivel de los lodos puede medirse introduciendo el caño de aspiración de una bomba a mano; se comenzará bombeando len­tamente y bajando el caño de succión hasta que comience a salir lodo negro; se suspende el bombeo y se mide la cantidad de caño introducido.

Debe vigilarse la salida de los lodos durante la limpieza para retener la cantidad de lodo sedimentado necesaria.

 

 

 

Limpieza

 

Consiste: 1º Extracción de las costras que eventualmente se hubieren formado en la superficie, de acuerdo a lo indicado, en el artículo anterior. 2º En la extracción de los lodos sedimentados en el fondo.

La extracción de los lodos sedimentados debe efectuarse nor­malmente recién a los 6 meses de su puesta en marcha, siempre que éstos no hubieren alcanzado el borde inferior de la cámara de sedimentación antes de ese tiempo.

El volumen de barro a extraer varía con el espacio disponible previsto en la cámara de digestión y puede determinarse única mente en forma teórica pues variará en cada caso particular.

Si la digestión ha sido buena, puede estimarse que la can­tidad de barro a extraer corresponderá aproximadamente a 0,25 litros por persona / día, o sea 0,25 por 365 igual a 0,091 metros

cúbicos-persona-año.                                                              1000

 

Como es absolutamente inconveniente que los lodos lleguen a obstruir la canaleta de sedimentación, deberá efectuarse la limpieza cuando el nivel de los  barros llegue, como máximo, a ocupar las 4/5 partes de la distancia entre el fondo de la cámara digestora y el borde inferior de la canaleta de sedimentación.

Este barro rico en fermentos debe servir para inocular la fermentación alcalino en el baño fresco que llega; por lo tanto no debe ser extraído todo; debe dejarse aproximadamente un 20 por ciento.

La extracción de todo el barro obligaría a someter a la cá­mara a un nuevo periodo de maduración, lo que debe evitarse, por cuanto éste demanda para su normal desarrollo un período largo.

La extracción se efectúa por presión hidrostática, bastando abrir la válvula ubicada sobre el caño de extracción y volcar direc­tamente sobre el carro atmosférico o a las cañerías de conducción a los lechos desecados si los hubiere.

La prolongación hacia arriba del caño de extracción de lodos, tiene el objeto de facilitar la tarea de desobstrucción en caso eventuales.

Cuando se trate de un pozo cuya ubicación en el terreno no permita la extracción en forma directa por medio de la válvula antedicha, deberá recurrirse al emplea de bombas.

Es conveniente extraer los lodos lentamente y durante los momentos de mayor consumo de agua para no perder el nivel del espejo líquido.

 

Pozo OMS. Puesta en marcha

 

la adición de cal, está sometida a las mismas exigencias que las del pozo Imhoff. La tabla de dosajes se da en el cuadro número 3.

 

CUADRO Nº 3 - POZO O. M. S.

 

Nº de personas

Kilos de cal

5

5

8

7

10

8

15

9

20

11

30

13

50

17

75

21

100

25

150

31

200

37

250

42

300

 

 

18

400

57

500

65

600

72

800

82

1000

90

 

Precauciones

 

Rigen todas las indicadas para pozos Imhoff.

 

Limpieza

 

Deberá procederse de la misma manera que para pozos Imhoff.

El nivel de los líquidos no deberá disminuir durante la extracción de lodos; par tal motivo deberá efectuarse durante las horas de mayor consumo de agua. Los OMS con capacidades de 100 personas en adelante, están previstos de cañería de extracción de lodos; por lo tanto bastará aplicar el caño de succión de la bomba al extremo de éste. Cuando la pendiente del terreno lo permita, la extracción se efectuará por intermedio de válvula en la forma descripta para el pozo Imhoff. Los pozos pequeños que carecen de cañería de extracción de lodos, se limpiaran por me­dio de un cucharón u otro recipiente con mango largo adecuado, o por medio de bomba, introduciendo convenientemente el caño de aspiración de la misma.

 

Para mantener el pozo en buenas condiciones y siempre que el funcionamiento haya sido normal, deberá hacerse cada 60 a 90 días por lo menos. Esta frecuencia se aplica para pozos de 400 personas en adelante. Los pozos de menor capacidad pueden limpiarse con intervalos mayores, según se cumplan las condicio­nes ya enunciadas. Por este motivo se aconseja durante los pri­meros tiempos, verificar la acumulación de los barros para poder fijar en la práctica la periodicidad normal de las limpiezas.

 

Pozo Steglau. Puesta en marcha

 

Se hace del mismo modo que para los pozos Imhoff. Los do­sajes de cal se dan en el cuadro Nº 4.

 

CUADRO Nº 4 - POZOS STEGLAU

 

Nº de personas                              Kilos de cal

400                                                     60

500                                                     75

600                                                     89

 800                                                    103

1.000                                                  120

 

 

Todos los dosajes son aproximados.

 

Precauciones

 

Deben tenerse en cuenta las mismas que para los pozos Imhoff.

Además deben desobstruirse eventualmente los conductos de ventilación que expulsan los gases, para evitar las pérdidas de capacidad en las cámaras digestoras.

 

 

 

 

Limpieza

 

Está sujeta como en los demás pozos a la marcha del pro­ceso digestivo y se efectuará como en ellos cuando el nivel de los lodos decantados llegue a las 4/5 partes como máximo, de la distancia entre el fondo y el borde inferior del cono decantador. La extracción de lodo se efectúa por bombeo y su destino final no difiere de los indicados precedentemente.

 

Uso de la máscara antigás

 

Deberá usarse sin excepción cuando sea necesario introdu­cirse en cámaras sépticas, pozos de digestión y aun en cámara de infección o pozos de cualquier tipo que, por su proximidad con pozos negros, puedan contener gases.

Podrá prescindirse de la máscara cuando las profundidades no sean mayores de 1,80 metros. La máscara deberá, ser del tipo con caño flexible, de un largo tal, que permita mantener su extremo libre fuera de la cámara o pozo. El extremo libre deberá asegurarse convenientemente para evitar que por descuido pueda caer en el interior de la misma.

Este tipo de máscara es el más seguro, pues no requiere carga con cartuchos especiales, siempre de dudosa eficacia, por tener éstos poder defensivo que decrece con el tiempo, con el ambiente en el cual se guardan y con la concentración de las gases. Además cualquiera de estos tipos requiere un porcentaje de oxígeno, no inferior al 17 % cosa muy difícil de asegurar, pues las concentraciones y los componentes varían con innumerables factores.

 

Precauciones

 

Antes de introducirse a las cámaras deberá probarse la re­sistencia respiratoria del encargado de la limpieza.

Al efecto deberá colocarse la máscara can el acoplamiento de la cantidad de caños flexibles que sea necesaria y tener pre­sente que a esta resistencia habrá que restarle la fatiga que produce el trabajo a que estará sometido durante la limpieza. No, deben usarse longitudes de caño mayares de 20 m. Deberá re­visarse cuidadosamente el estado de funcionamiento de las vál­vulas de expulsión de aire y la correcta adaptación a la cara para evitar la entrada gases.

El caño deberá quedar bien asegurado a la cintura para per­mitir la soltura de los movimientos y evitar que estos se trans­mitan a la máscara.

Cuando los caños son viejos deberá comprobarse su herme­ticidad antes de usarlos.

 

Limpieza

 

La máscara y las cañerías después de su uso, deberán lim­piarse prolijamente y lavarse can agua tibia y jabón y secarse expuestas al aire libre y a la sombra. 

Las válvulas deberán humedecerse cada seis meses, con una solución al 10 % de glicerina y agua. Antes de lavarse deberá sacarse los vidrios y válvulas y limpiarse aparte.

Una vez secas las partes de goma, deberá guardarse en  su caja correspondiente y en ambiente fresco; es conveniente pa­sarle una pequeña cantidad de talco a las partes de goma.

 

ANEXO Nº 3

 

Tipo Portland Cement Association.

 

 

 

DIMENSIONES INTERNAS

Nº de personas

Largo A m.

Ancho B m.

Profundidad C del liquido

Volumen de liquido en m3

7

2,00

0,90

1,20

2,160

10

2,30

0,90

1,20

2,480

14

2,50

0,90

1,20

2,700

21

2,70

1,20

1,20

3,890

24

3,20

1,20

1,20

4,600

 

Tipo Obras Sanitarias Nación.

 

DIMENSIONES INTERNAS

Nº de personas

Largo A m.

Ancho B m.

Profundidad C del liquido

Volumen de liquido en m3

10

1,35

1,35

1,40

2,550

15

1,60

1,60

1,45

3,720

20

1,80

1,80

1,50

4,860

30

2,15

2,15

1,60

7,400

50

2,70

2,70

1,70

12,400

 

Dimensiones de las cámaras sépticas Tipos Portland Association y O.S.N.

 

CUADRO Nº 2

 

CAPACIDADES REQUERIDAS PARA CAMARAS SÉPTICAS EN CASAS PARTICULARES

 

 

DIMENSIONES RECOMENDADAS

Numero de dormitorios

Numero máximo de personas

Capacidad nominal líquida de la cámara en litros

Ancho

Longitud

Profundidad del líquido

Altura total

Volumen total en pies cúbicos

 

 

 

Pies

Pulg.

Pies

Pulg.

Pies

Pulg.

Pies

Pulg.

 

2 o menos...

4

1992,5

3

0

6

0

4

0

5

0

90

3.................

6

2271

3

0

7

0

4

0

5

0

105

4.................

8

2848,75

3

6

7

6

4

0

5

0

130

5.................

10

3406,5

3

6

8

6

4

0

5

0

150

6.................

12

4163,5

4

 0

8

6

4

6

5

6

190

7.................

14

4542

4

0

9

0

4

6

5

6

200

8.................

16

5777,5

4

6

10

0

4

6

5

6

250

 

NOTA. – Capacidad basada en el mínimo de dormitorios de la casa. El volumen total en pies cubitos incluye el espacio de aire por encima del nivel líquido. Cuando se emplean cámaras de dos compartimientos, el de entrada debe tener una capacidad de liquido de no menos de 1992,5 litros. (Public Healts Reports, U.S.A.).

 

 

 

 

 

 

 

CUADRO Nº 3

 

CAPACIDADES REQUERIDAS PARA CAMARAS SEPTICAS EN CAMPAMENTOS Y ESCUELAS

 

Número de personas

 

DIMENSIONES RECOMENDADAS

Campamentos

Escuelas

Capacidad nominal líquida de la cámara en litros

Ancho

Longitud

Profundidad del líquido

Altura total

Volumen total en pies cúbicos

 

 

 

Pies

Pulg.

Pies

Pulg.

Pies

Pulg.

Pies

Pulg.

 

40

60

3785

4

0

8

6

4

0

5

0

170

80

120

7570

5

0

11

0

5

0

6

3

345

120

180

11355

6

0

13

6

5

0

6

3

505

160

240

15140

6

0

18

0

5

0

6

3

675

200

300

18925

7

 0

18

0

5

0

6

6

880

240

360

22710

8

0

20

0

5

0

6

6

1040

280

420

26495

8

6

20

0

5

0

7

0

1190

320

480

30300

8

6

23

0

5

0

7

0

1370

 

NOTA.- El volumen total en pies cúbicos incluye el espacio de aire por encima del nivel líquido. Cámaras con capacidad superior a 30.300 litros deben ser diseñadas para los requerimientos específicos; de cualquier manera, en tales casos la necesidad de un tipo de tratamiento mas completo debe ser estatuída. (Public Health Reports. U.S.A.)