Fundamentos de la Ley 12711

 

 

            El presente proyecto se basa en la intención de concretar por fin un deseo que la comunidad de Vicente López, guarda desde hace más de veinte años. Las cosas no ocurren por casualidad y evidentemente la Casa de la Memoria y la Resistencia, es testigo evidente de ello, este caserón, es nada más y nada menos que un pedazo de historia no borrada, o mejor dicho recuperada desde la noche negra de la dictadura, casi incólume, durante 25 años de historia argentina, sus paredes con afiches y leyendas, semeja quizá una jabonería de Vieytes de la historia anterior.

            En el año 1973, en el marco de una sociedad que buscaba profundizar los caminos para superar años de estancamiento, proscripciones y alteraciones del orden democrático, la unidad básica Combatientes Peronistas se abrió como central de la regional 1 de la Juventud Peronista, con la intención de brindar un espacio de reunión permanente para los jóvenes que masivamente se volcaban a la militancia en aquel tiempo.

            Allí convergieron diferentes corrientes políticas y fue el local de coordinación de actividades de los diferentes frentes de base de la zona norte.

            Los responsables de esa convocatoria, Jorge y Miguel Lizaso, provenían de una familia de conocida trayectoria, ya que Pedro Lizaso, su padre, fue el primer intendente peronista de Vicente López, (designado comisionado municipal después de las elecciones del 24 de marzo de 1946) y Carlos Lizaso, hermano de ambos, uno de los fusilados en los basurales de José León Suárez, en el año 1956.

            Por su parte el “TotoLizaso, Arnaldo, el hermano mayor, tuvo una larga trayectoria militante en el peronismo y falleció en el año 1996 en el exilio.

            También Amelia Lizaso, esposa de don Pedro, fue una militante y una compañera fiel y digna. Una familia que entregó su vida y su tranquilidad, en pos de un país mejor, y una realidad más digna, como ellos concebían la vida.

            Desde Malaver y Mitre, partieron el 25 de mayo de 1973 columnas de jóvenes que festejaban el regreso de la democracia y la vuelta del peronismo al gobierno, de ello dan testimonio único los afiches que milagrosamente se conservan intactos en las paredes y de los cuales se adjuntas fotografías.

            Pasaron 24 años desde que se hubo que cerrar la casa. El allanamiento de los últimos días del mes de agosto de 1974, preanunciaba tiempos muy difíciles. Se apagó Combatientes Peronistas y esas paredes tapiadas y apropiadas constituyen una metáfora de los que se quiso hacer en una generación de argentinos: borrarlos de la memoria y de la historia.

            Cuando el 6 de diciembre de 1998, un grupo de viejos militantes de la caja junto a miembros de la organización HIJOS y otras organizaciones de derechos humanos, sociales y políticas, conformaron la Comisión de la Memoria y la Resistencia JorgeNonoLizaso para rescatar del olvido a la casa, encontrando intacta su historia en las paredes, afiches y pintadas, bandos y volantes que hablan por sí mismos y transmiten el espíritu de una época febril y decisiva.

            El 11 de marzo de 1999, se inauguró, en la ya célebre esquina, un monolito en memoria y respeto, por lo allí dieron testimonio de sus nobles ideales y por ello fueron desaparecidos por la dictadura militar de 1976.

            Permitir que sea demolida sería una seria responsabilidad por parte de quienes no tomen esta propuesta como una necesidad verdadera. Conservarla es un ejercicio de memoria y una oportunidad de demostrar la madurez de una sociedad y sus instituciones que asumen su propia historia, por encima de los colores partidarios, como punto de partida para encarar los desafíos del presente y el futuro.

            Evitar por todos los medios la demolición de la casa de Malaver 3686 esquina avenida Mitre, de la localidad de Munro, partido de Vicente López, la expropiación y la entrega de la misma a la entidad de bien público denominada Casa de la Memoria y la Resistencia JorgeNonoLizaso, para conservarla, remozarla, con fines únicamente altruistas y sin fines de lucro, para ser convertida en espacio de participación popular, con el compromiso de informar, transmitir y difundir la historia reciente del país en el ámbito más legítimo, que es donde transcurriera.

            Por las razones expuestas es que solicito a los señores legisladores la aprobación del presente proyecto de ley.