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Fundamentos de la Ley 12122
HONORABLE LEGISLATURA: Todas las costas de nuestro litoral marítimo, y especialmente las que se extienden desde Camet Norte, en el partido de General Pueyrredón, pasando por los balnearios de Santa Clara del Mar, Mar del Cobo y Mar Chiquita hasta la albúfera ubicada en el partido del mismo nombre, vienen padeciendo un largo y continuo proceso de degradación que obedece a diversas razones. Por un lado, la erosión natural ha llegado al punto límite de poner en peligro las viviendas ubicadas sobre la playa ante el avance de las aguas. Las precarias defensas construidas con acumulación de rocas en algunos tramos de la costa han demostrado ser insuficientes para contrarrestar el devastador efecto de este fenómeno. Los médanos remanentes, por su parte, no sólo continúan siendo destruidos por el paso de vehículos recreativos de todo tipo sino que, en forma incomprensiblemente irresponsable, se ha permitido la extracción de arena por parte de empresas. En este sentido, la albúfera conformada por la laguna de Mar Chiquita, resulta particularmente afectada y resulta alarmante la falta de protección y previsión que ha acentuado su deterioro. En efecto, ésta ha sido una de las zonas más dañadas por la sudestada de abril de 1997 cuyo saldo ha sido la virtual destrucción de un balneario y de dos viviendas del casco urbano. La región en su conjunto sufre asimismo el efecto negativo de obras realizadas desaprensivamente, sin las precauciones necesarias o incluso con total negligencia. Tal es el caso del puente que conecta con el C. E. L. P. A., que ha modificado el escurrimiento natural de las aguas; las escolleras interiores, que generaron una elevación de los barros de la laguna o la apertura de una boca, que modificó todo el conjunto. Cabe recordar que en el proyecto F-84/ 97-98, presentando en marzo de 1997 y aprobado el 10 de abril del mismo año donde se solicita se declare el estado de emergencia en la región, ya habíamos alertado sobre la necesidad de revertir este nefasto proceso. Es necesario, en consecuencia, planificar una serie de obras que reviertan todo este proceso de degradación que apunten a recuperar los valores de una zona privilegiada por su belleza natural y su potencial turístico. Se trata, por un lado, de dar una respuesta urgente e inmediata para evitar que estas costas, especialmente los aproximadamente dos kilómetros en los que se extiende el denominado Balneario Parque Mar Chiquita, sigan sufriendo tan dramáticamente el efecto de la erosión marina, lo que podría lograrse a través de la construcción de espigones que impidan el avance del mar y propicien la recuperación de arena en esas playas. En tal sentido, la Ley 11.340 habilita al Poder Ejecutivo a ejecutar las obras y/o acciones necesarias para solucionar o aliviar las consecuencias de la emergencia o desastre y evitar que las mismas se agraven. Sin perjuicio de ello, por tratarse de un problema que afecta a todo nuestro litoral, es necesario realizar un estudio de la región costera como un sistema integral, a fin de encontrar una solución definitiva a este problema. Debe comprenderse que destinar fondos a la reparación ecológica de esta zona representa una inversión altamente beneficiosa ya que, además de contribuir a la defensa de nuestro propio patrimonio geográfico y ambiental, realzará la riqueza turística de toda nuestra costa atlántica a ella un importante atractivo que, hasta el presente no ha sido valorizado en su real dimensión. Por lo expuesto, se presenta el adjunto proyecto solicitando para el mismo el voto favorable de los señores legisladores.
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