Fundamentos de la Ley 13655
Se somete a consideración de Vuestra Honorabilidad el proyecto de ley que se adjunta para su sanción, a través del cual se pretende legalizar una situación que se evidencia de hecho en el partido de Magdalena y distritos vecinos.
Instituciones y la ciudadanía en general, han reiterado en innumerables oportunidades el anhelo de que su pueblo reciba el nombre de Bartolomé Bavio, reemplazando el actual nombre de General Mansilla.
Nos referimos entonces a un tema no menor, puesto que está en inmediata relación con la identidad del pueblo.
La forma generalizada de denominación de dicha pueblo es Bartolomé Bavio, que se registra, inclusive en algunas versiones de material cartográfico y en textos oficiales.
Un repaso histórico refuerza esta propuesta:
En el año 1796, Antonio Romero le vende a Andrés Cajaraville un terreno de estancia en el "Pago de la Magdalena". En mayo de 1821, le vende otra parte.
Cuando muere el matrimonio Cajaraviile, sus herederos dividen las tierras, entre cinco hermanos: Francisco, Mateo, Miguel, Juliana y Manuela, que se casa con José Antonio Bavio.
En el año 1872, fallece doña Manuela Cajaraviile de Bavio. Heredan sus hijos Bartolomé, Diego, Isidro y Tiburcio. A Bartolomé le correspondió la fracción denominada Santa Rita.
Los vecinos de Magdalena, siendo gobernador Carlos Casares, en 1872 iniciaron las gestiones para que el ferrocarril de Buenos Aires a Ensenada se prolongara hasta Magdalena.
Esto benefició a los campos de Cajaraville y de Bavio, y fue don Bartolomé el que donó a la compañía toda la superficie para las vías y la estación, con el compromiso que ésta se llamara Bartolomé Bavio.
La línea se inaugura el 15 de mayo de 1887, pero todavía no había señales del trazado de un pueblo.
En 1901, uno de los Bavio vendió su campo a Adrián Hernando y, luego, éste se asoció con Julián Pallejá quienes propusieron la fundación de un pueblo sobre la Estación Bartolomé Bavio.
Presentaron al gobierno la solicitud de la fundación del pueblo y el 14 de agosto del mismo año, se acepta el proyecto de los señores Hernando y Pallejá, para fundar el pueblo "Mansilla", en recuerdo del pueblo español de donde uno de ellos era oriundo, pero con la salvedad de que se le agregara la palabra "General".
Dicha observación surgió por parte del gobierno alegando que no se podía colocar el nombre de una ciudad extranjera.
Es decir, el nombre General Mansilla no surge en recuerdo de quien fuera militar y político de nuestro país con activa actuación en el siglo XIX, sino que es un híbrido de intenciones de los fundadores y el gobierno.
El decreto por el cual sé autorizó la fundación de este pueblo, sobre la estación Bartolomé Bavio, está refrendado por el gobernador Dr. Bernardo de Irigoyen y el Ministro de Obras Públicas Ing. Julián Romero.
Hoy con 105 años, General Mansilla es simplemente una denominación que figura en los textos fundacionales. Bartolomé Bavio es el nombre que se encuentra en la memoria, el presente y la intención de este pueblo en donde el Ferrocarril y su estación significaron desarrollo, crecimiento y progreso.
A mérito de las consideraciones vertidas, es que se solicita de ese Honorable Cuerpo, la pronta sanción del proyecto adjunto.
Dios guarde a Vuestra Honorabilidad.