FUNDAMENTOS DE LA LEY 14709

El presente proyecto de ley se erige en una herramienta fundamental para la caracterización y delimitación de la Zona Austral Desfavorable de la Provincia de Buenos Aires, siendo ésta comprendida por los distritos de Villarino (exceptuando a la zona de CORFO Rio Colorado) y los cuarteles V, VI, VII, VIII, IX, X, y XI, y III, IV y V de los partidos de Puan y Tornquist respectivamente.

Esta área pertenece a las regiones áridas del país, y no es, ni se corresponde con la pampa húmeda. Sus características bio-edafo-climáticas, le otorgan una alta fragilidad al sistema productivo agropecuario.

A la zona se la puede definir técnicamente también, como aquella ubicada por debajo de la isohieta de 600mm (zona seca con déficit hídrico frecuente).

Desde 1991 hasta la fecha la zona estuvo ininterrumpidamente en emergencia o desastre agropecuario utilizando los alcances de la Ley № 10.390 (de carácter transitorio) para hacer frente tanto a las distintas contingencias climáticas como económicas.

Los continuos pedidos de emergencia y desastre agropecuario por sequía de los partidos que comprenden la zona austral desfavorable bonaerense confirman que este no es fenómeno de características excepcionales o coyunturales, sino de características permanentes.

Más que la excepción a la regla, decimos que es la regla.

Dado que parte de una situación natural desventajosa y desigual en la base productiva (fragilidad del sistema, rendimientos marginales) respecto al resto de la Provincia, la Zona Austral Desfavorable de la Provincia de Buenos Aires requiere un tratamiento diferenciado en políticas públicas (productivas, tributarias, crediticias, herramientas de promoción, etc.), que posibiliten que pueda alcanzar un desarrollo productivo semejante al resto del territorio provincial.

En síntesis, para cubrir tal situación de desigualdad natural, se requiere del apoyo diferenciado desde el Estado para propiciar una reconversión productiva, que le otorgue viabilidad y sostenibilidad al sistema.

El desafío público está en generar las condiciones de desarrollo igualitarias, partiendo de bases desiguales, premisa básica del federalismo: redistribuir recursos para alcanzar igualdad de oportunidades de desarrollo.

Por lo antes mencionado, se desprende que esto no es un planteo autonomista o separatista regional, muy por el contrario, responde a esta concepción federal que promueve la integración real de las distintas regiones en un todo, que es la República Argentina, permitiendo que zonas no tan agraciadas por sus condiciones naturales, geográficas, alcancen también las condiciones para desarrollarse.

Hoy las localidades de Villa Iris en el distrito de Puan, Algarrobo, Médanos y Teniente Origone en el partido de Villarino, y Chasicó en Tornquist; que se encuentran comprendidas en la zonificación y delimitación que establece el presente proyecto de ley, sufren una realidad que debe ser emparentada de forma directa con la zona norte del distrito de Patagones y es por eso justo que tengan el mismo tratamiento impositivo y de promoción de políticas públicas dentro de la Provincia de Buenos Aires.

DIAGNÓSTICO AMBIENTAL Y SU IMPACTO SOCIO-ECONOMICO EN EL AREA DEL PROYECTO DE LEY.

Los suelos del área se encuentran en situación de vulnerabilidad frente al cambio climático ya que, por su fragilidad biofísica y por la intervención de factores antropogénicos, son tierras que muestran severos procesos de desertificación y cuentan con bajos niveles de resiliencia.

El proceso de desertificación en la zona austral desfavorable data de muchos años recrudeciendo desde el 2005 a esta parte.

En el año 2009 se registró la peor sequía desde los últimos 50 años en la zona, marcando la tendencia de 5 años de baja de precipitaciones, llegando a 185 mm. Este fenómeno generó graves pérdidas en cultivos y verdeos así como de pastizales naturales.

Esto se refleja en el ámbito rural y urbano local. Si bien el proceso de desertificación ha afectado a toda el área, los pueblos más pequeños no han tenido a su alcance alternativas posibles para atenuar la crisis.

El colapso productivo del sector rural a razón de lo expuesto impacta de lleno en la vida cotidiana de estos pueblos, directa o indirectamente (empleados, peones, comercio, transporte, talleres, servicios). No existen aún industrias o empresas 100 % independientes del sector agropecuario.

Los pequeños y medianos productores que subsisten en la actualidad, sufren de los factores comúnmente mencionados en el desencadenamiento del proceso de desertificación local.

Bajo las condiciones descriptas la zona se desarrolló en general desde la agricultura básicamente triguera con ganadería de forma complementaria, aunque la cría de ovinos llegó en algunos casos a tener un papel preponderante disminuyendo paulatinamente a niveles mínimos.

Como resultado de todos los factores expuestos, la zona se enfrenta con una realidad que presenta suelos empobrecidos, herramientas obsoletas e infraestructura ausente o muy deteriorada (alambrados, corrales, viviendas rurales, molinos, etc.).

Respecto al sector agropecuario significó pérdidas millonarias difíciles de estimar en números, aunque intentaremos dar una idea de ello.

Localmente se perdió en el período mencionado un 40 % del stock ganadero, siendo en la zona un componente más que importante en el volúmen de la actividad económica general.

Si bien gran parte de esta pérdida se dio por venta, la liquidación se realizó a valores irrisorios. A esto deben sumarse los costos de alimentación y veterinarios originados por la sequía.

Las pérdidas en agricultura son más difíciles aún de estimar, pero se acumulan a la fecha 7 años de cosechas escasas o nulas con grandes costos de inversión en combustible, semillas, labores, etc.

Por lo expuesto, solicito a los señores Senadores aprueben el presente proyecto.