Fundamentos de la

Ley 11637

            Las comunidades logran la perdurabilidad cuando conjugan en su evolución el trabajo, afectos compartidos, arraigo a la tierra, respeto profundo de sus tradiciones y una búsqueda de progreso constante. En ellas se funden el pasado, el presente y el futuro; una vida y un destino en común; una identidad histórica.

            Así se define Pergamino, la bien llamada “perla del Norte” bonaerense. El origen de la “Dormida de Pergamino” (nombre primitivo) debe atribuirse al hábito de los viajeros tuvieron de descansar y pernoctar en ese paraje, apto por su situación en las distancias y junto a un curso de agua.

            Un documento que data del año 1626 redactado por el Cabildo de Buenos Aires hace mención a la “dormida de Pergamino” (Archivo General de la Nación: Tomo VI, página 241).

            En 1749 pasan por el asentamiento dos sacerdotes jesuitas: Javier Miranda y Florián Paucke, quienes mencionan en sus realtos una población que no “supera a treinta personas el número de habitantes”. El P. Baucke ha legado un importante libro de crónicas de viaje e innumerables dibujos y acuarelas sobre pobladores, poblaciones y fauna, como así también una detallada descripción del “Fuerte Pergamino”. Años más tarde, 1770, hace su paso don Calixto Bustamante Carlos Inca, alias “Concolocorvo”, quien describe el vecindario, costumbres y caracteres del Fuerte Pergamino.

            Durante el Siglo XIX suceden en esta localidad algunos acontecimientos dignos de destacar. El 19 de agosto de 1806 se le informa al virrey Sobremonte en Fontezuela (partido de Pergamino) de la inconveniencia de proseguir viaje desde Buenos Aires.

            En junio de 1810 hace su paso por Pergamino el ejército expedicionario del Norte al mando del Coronel Ortiz de Ocampo.

            El 3 de abril de 1815 se produce el pronunciamiento de Fontezuelas; se rebelan las tropas de Álvarez Thomas a la lucha contra Artigas. Este suceso determina la caída del directorio presidido por Carlos M. de Alvear.

            El 1 de febrero de 1820, se libra la primera batalla de Cepeda, donde vencen las tropas de los brigadieres generales Francisco Ramírez y Estanislao López y la derrota del general Rondeau, representante del directorio.

            El 22 de enero de 1822, se crea el primer juzgado de Paz, el cual queda a cargo del Dr. Mariano de la Fuente.

            Durante 1844 y 1845 se calcula la población de Pergamino en alrededor de tres mil quinientas personas. Cuenta con un médico, Dn. Benito Bárcena y una farmacia a cargo de Dn. José Torioni.

            El 21 de mayo de 1848 tiene lugar una invasión india a Rojas y Pergamino.

            En septiembre de 1850 se instala la primera industria a vapor (una grasería).

            El 20 de enero de 1852 acampa el Ejército Grande en Pergamino.

            El 11 de septiembre de 1852 se instala la Comandancia de Pergamino, sede del Regimiento IV de guardias nacionales al mando del coronel Gorordo.

            Durante 1854 se reconstruye la iglesia parroquial, se reinstala la escuela pública, se crea la primera comisión de fomento y se adquiere la autonomía y jurisdicción de municipio.

            En el mes de diciembre de 1860 y por iniciativa de Domingo Faustino Sarmiento se crea la biblioteca pública.

            El 24 de octubre de 1864, la Ley Provincial Nro. 422 establece la división territorial de los partidos de la Provincia situados al interior del Río Salado. El artículo 2, inciso 23 hace mención al partido de Pergamino.

            El 4 de mayo de 1869 queda instalado en Pergamino el telégrafo.

            El 25 de septiembre de 1872 se funda el Hospital “San José” con el empeño de los doctores Joaquín Menéndez, José Reynaudi y Atilio Búcar.

            El 9 de marzo de 1874, inicia sus actividades en Pergamino el Banco de la Provincia de Buenos Aires.

            En este año, Dn. Pedro Ugale funda “El Pampero”, primer periódico de Pergamino.

            El 30 de agosto de 1882 llega el Ferrocarril a Pergamino. Unía a este lugar con Luján.

            El 19 de julio de 1886, se constituye la primera municipalidad. Dn. Juan José Cané es elegido intendente.

            El 15 de febrero de 1892 inaugura su actividad en Pergamino el Banco de la Nación Argentina.

            Durante el año 1895 se produce una epidemia de cólera muy grave debido a las condiciones de salubridad agravada por la sequía del arroyo Pergamino. El 16 de abril el intendente Dn. Teófilo Puentes comunicaba al Consejo de Higiene de la Provincia que la epidemia tendía a aumentar.

            Recién en el mes de junio no se presentan más casos.

            Ese año el partido cuenta con 155 propietarios de tierras rurales dedicadas a la agricultura y la ganadería; el número de arrendatarios era 260 y el de medianeros de 33.

            En la “Historia del Partido de Pergamino hasta 1895" Dn. Luís Jiménez Colodrero refiere que "la importancia adquirida por la población de Pergamino en su aspecto económico-social y demográfico hizo que conjuntamente con otros cuatro pueblos de la Provincia, el gobierno de Guillermo Udaondo dispusiera su reconocimiento en el rango de ciudad”, agregando que '''...la población de Pergamino, al ser declarada ciudad, alcanzaba a 23.945 habitantes..."

            El  reconocimiento al que hace referencia Giménez Colodrero está contenido en el texto de la Ley provincial 2.547 sancionada el 22 de octubre de 1895 por la cual se confiere “el título de ciudad a los pueblos de Azul, Bahía Blanca,  Barracas al Sud (Avellaneda) y Pergamino. En esta ley basamos nuestra presente iniciativa, destacando la fortaleza, la trascendencia de un partido.

            Retomando párrafos de, Jiménez  Colodrero, "la mayoría de los centros de población en el partido de Pergamino se formaron como consecuencia inmediata a la instalación de las estaciones ferroviarias, salvo muy pocas excepciones, en que aquellos precedieran a éstas. Las empresas ferroviarias .buscaron, por lo general los centros estratégicos de producción agropecuaria para faciiitar el transporte de los productos. A su vez, la estación era un poderoso motivo para que a su alrededor se formaran núcleos demográficos de vida propia… desde luego que el ferrocarril abrió las vías de adelanto en la campaña, y unido a esto, la subdivisión de la tierra, por las nuevas ventajas que aparecieron para la comercialización de la agricultura, fueron los factores determinantes de Ia formación de los pueblos del partido”.

En 1919 la población sobrepasaba los 50.000 habitantes (si tenemos en cuenta que en 1895 tenía 23.945, el aumento fue prácticamente del 100%).

El 29 de abril de 1936 el gobierno provincial incluye a esta ciudad en el plan de obras sobre caminos que unen las poblaciones o de acceso a otros principales y calles complementarias, dentro de los límites del partido.

En 1968, Pergamino cuenta con alrededor de 3.000, comerciantes y un nivel ascendente en la industria (textil, metalúrgica, agropecuaria).

Cuna de personalidades como el Presidente Constitucional Dr. Arturo Humberto Illia o el maestro compositor Atahualpa Yupanqui y de miles personas anónimas que han contribuido a forjar el desarrollo y a concretar los sueños, la "ciudad crecida entre maizales”, “la perla del Norte" , representa un testimonio de historia viva. Queremos remarcar en la presente ley de identidad de una localidad templada en este primer siglo de vida como ciudad de la provincia de Buenos Aires

            En el cruce de la Rutas nacionales 8 y 188 (primer cruce de caminos) se leen como testimonio elocuente los versos de Alejandro González Gattone, en su "Definición de Pergamino":

 

Oh, la ciudad crecida entre maizales

Frescas aún las huellas de la indiada

Fuiste albergue fugaz, dulce posada

de áspero desierto en los umbrales.

ciudad sin fundación, hija de iguales

diste a la sed tu arroyo, fresca aguada,

diste tu corazón, sin pedir nada.

 

Palpitante en las luchas nacionales

sobre tu suelo, principal riqueza,

tus torres junto a  histórico camino.

 

Son frutos del trabajo, en su pureza,

fruto del gringo  y gaucho es: tu destino.

Ciudad de paso, llena de belleza

Puerto de tierra y luz es pergamino.