Fundamentos de la Ley 12662

 

            La forestación, concebida como una actividad productiva, no está muy difundida en la provincia de Buenos Aires. La incorporación de la actividad comenzó como productora de servicios (cortinas, rompevientos, montes de abrigo, protección de cuencas, fijación de dunas y médanos, prevención de la erosión hídrica y eólica, forestación de cascos y avenidas en establecimientos) y no como generadora de ingresos en forma directa. Como resultado de ello el recurso originado fue totalmente heterogéneo en cuanto a especies y distribución territorial se refiere.

            Al plantearse la actividad como generadora de ingresos en forma directa, un aspecto que condiciona su aceptación es el turno de aprovechamiento, ya que este determina el retorno económico en el mediano a largo plazo.

            La implementación de una política de incentivos, canalizada a través de regiones permitirá la generación de recursos concentrados y que satisfaga a los requerimientos de la industria transformadora.

            En función de esto, creemos que es necesario e imperioso que se implemente un programa de incentivos por parte del gobierno provincial, tendiente a la formación de un recurso forestal de calidad y concentrado en cuencas, lo que propiciará la futura radicación de industrias de procesamiento de esa materia prima.

            Es importante resaltar que la generación de empleo permanente en áreas rurales y la posibilidad de radicación de grandes industrias consumidoras de madera, adquieren gran importancia, pues contribuyen a paliar la problemática del desempleo.

            En este sentido, la generación de empleos para las actividades de producción en viveros, plantación y mantenimiento, de acuerdo a los objetivos planteados para cada uno de los años, más puestos de trabajo que se crearían en las tareas de aprovechamiento y en su transformación primaria (chips), hacen altamente justificable la implementación de la propuesta.

            Cabe acarar que el destino final consignado (chips), es la alternativa que incorpora menos valor agregado. La instalación de industrias mecánicas y químicas de la madera, una vez logrado el recurso, modificarán sustancialmente las pautas previstas.

            La provincia de Buenos Aires necesita generar un recurso forestal que le permita insertarse en el mercado internacional de productos forestales, y abastecer la demanda interna. Para ello, la Provincia cuenta con innumerables ventajas que le permiten desarrollar esta actividad.

            La Provincia presenta condiciones ecológicas y de infraestructura que la hacen apta para el planteo de distintos sistemas de producción forestal, capaces de producir materias primas que abastezcan el mercado interno, radicado en más de 60% en la Provincia, y permitan tener una presencia más activa en el mercado mundial.

            Debe generar un recurso forestal que le permita presencia en los mercados mundiales y garantizar el abastecimiento de los locales. Para ello su recurso total no debiera ser inferior a las trescientas cincuenta mil hectáreas (350.000 ha.).

            Las superficies de neta aptitud forestal disponibles en el territorio provincial superan los dos millones doscientas mil hectáreas (2.200.000 ha.), lo que permitirá el cumplimiento de los objetivos en cuanto a las superficies a generar con nuevo recurso.

            En cuanto al tipo de forestaciones a desarrollar las mismas tendrán un objetivo central, la producción de madera con fines comerciales. Dentro de ellas será necesario orientar la formación del recurso a la producción de maderas de calidad.

            Las actuales medidas promocionales, han resultado insuficientes para el cumplimiento de estos objetivos, por lo que durante el período en el cual se alcance la generación de 30.000 ha./año, en la Provincia, resulta imprescindible la instrumentación de otros incentivos. La provisión de material de plantación a los interesados es la medida que puede revertir esta situación.

            La Provincia está en condiciones de impulsar esta medida, en razón de que con una exigua inversión, es la que requiere el más bajo presupuesto para su implementación, incide de manera determinante en los costos de producción primaria, obteniendo una alta relación costo-beneficio para el productor, con lo cual se provoca un cambio de actitud generando una buena disposición hacia la adopción de la forestación.

            Asimismo, el cambio en la actitud del productor estriba fundamentalmente en las ventajas que el sistema presenta, puesto que la incidencia de los plantines en el costo total es significativa y por lo tanto la provisión de material de plantación, mejora en gran medida la relación costo-beneficio.

            La entrega de plantines de calidad garantizada por el Ministerio de Asuntos Agrarios, permitirá la formación de bosques de calidad, a partir de semilla certificada y con un adecuado control de la etapa de producción en vivero.

            Esta propuesta tiene por último el objetivo de darle continuidad a iniciativas que se vienen realizando a través de la Resolución 488/97 del Ministerio de Asuntos Agrarios y que hoy los actores involucrados necesitan.

            Por todo lo expuesto, y en convencimiento que los señores senadores sabrán valorar la importancia de lo planteado, solicito que me acompañen con su voto favorable la presente iniciativa.