Fundamentos de la
Ley 13866
Vinculado intensamente a la actividad cultural de Zárate desde sus inicios, el Teatro Coliseo sigue la tipología del teatro lírico italiano, destacándose tanto por su planteo arquitectónico de excelencia como por su acústica que ha merecido los más elogiosos comentarios por parte de musicólogos de nota.
Grandes nombres y orquestas de música clásica desfilaron por su escenario, figuras del ballet clásico, moderno y contemporáneo, compañías de teatro argentino e internacional, cantantes y orquestas populares, comediantes y artistas afamados, que jalonaron la historia del espectáculo nacional fueron allí admirados y aplaudidos. Carlos Gardel, Azucena Maizani, Atahualpa Yupanqui, Berta Singerman, Luis Sandrini, Pepe Arias, Tita Merello, Luisa Vehil, Libertad Lamarque, China Zorrilla, Francisco Petrone, Enrique Muiño, son algunos de los artistas que engalanaron el recinto con su presencia.
El célebre Pablo Casals, Tito Schipa y el Doctor Ortiz Tirado también fulguraron en sus presentaciones y cautivaron al público que los acompañó y vivó con emoción.
Obras del teatro clásico universal fueron representadas a lo largo de su prolongada actividad, actualmente continúan haciéndolo con creciente éxito y participación del público.
La sede y salones de
La conservación y estado del conjunto edilicio son destacables por el respeto a sus características originales y el mantenimiento de los usos y funciones que motivaron su creación allá por la década del 1920.
La amplia documentación respaldatoria que acompaña a los fundamentos vertidos, me induce a solicitar a las señoras y señores legisladores acompañar con su voto afirmativo el proyecto de ley.
DOCUMENTACION HISTORICA - TÉCNICA
DENOMINACIÓN Y LOCALIZACIÓN DEL MONUMENTO
Teatro Coliseo y Sede de
19 de Marzo Nº 314 esquina Independencia Zárate – Provincia de Buenos Aires.
Nomenclatura Catastral: Circunscripción I – Sección D – Manzana 254 – Parcela 15.
SITUACION JURÍDICA DEL BIEN
Propietario: Sociedad
UNIONE ITALIANA XX SEPTIEMBRE DE ZARATE (Se adjunta copia Cédula Catastro Parcelario Urbano – Marzo de 1.942 y Plancheta Catastral).
MEMORIA HISTORICA
Desde fines del siglo pasado y hasta las primeras décadas del presente las diversas comunidades extranjeras desempeñaron un rol fundamental no sólo como instituciones mutuales sino, también, como destacados centros de actividades culturales y sociales. Por lo tanto en su exteriorización física la representatividad y el carácter simbólico eran los factores principales que debían mostrar sus edificios en los medios urbanos en los que se insertaban.
No fue excepción a esa norma el
Teatro Coliseo y Sede de
Muestra elocuente de ello es, en
el primer aspecto, la investigación censal realizada en 1906, por
Hacia 1919,
De acuerdo con sus anhelos, Don
Ernesto De Michelis pensó que este conjunto
arquitectónico debía representar la potencialidad económica y espiritual de la
colonia italiana en Zárate y que su construcción resolvería el problema
financiero de la institución, con el producido del salón de espectáculos, el bar-confitería y el recinto para bailes y fiestas en
general. El proyecto fue encargado en 1.919, al arquitecto Enrique Macchi, profesional de Buenos Aires experimentado en la
construcción de recintos teatrales, realizando
En efecto, recién en la asamblea del 27 de mayo de 1927 y, nuevamente, con la presidencia de Don Ernesto De Michelis (que había de ejercerla ininterrumpidamente hasta 1957), la comisión directiva y un grupo de socios entusiastas puso a consideración el proyecto realizando una amplia exposición del mismo. Luego de una agitada sesión, con fuertes discusiones y resistencias de una minoría que, quizás no alcanzaba a valorar la trascendencia del plan propuesto, el mismo fue aprobado por quinientos asociados quienes autorizaron, además, a la comisión directiva y a una comisión ad-hoc, (la de financiación), a darle forma definitiva.
Una vez aprobado el proyecto,
La piedra fundamental se colocó el 20 de septiembre de 1927, siendo madrina de la ceremonia la esposa del Dr. Bertero y padrino el Sr. De Michelis. A partir de entonces, comenzaron los trabajos bajo la dirección técnica del Arq. Enrique Macchi, asistido por el arquitecto Félix Distasio, siendo adjudicada su ejecución a los constructores José Piccirilli y Adriano Roncaglia. Destacadas casas comerciales de Zárate fueron contratadas para satisfacer distintos rubros de la obra, entre ellas: Piccirilli y Roncaglia Materiales de Construcción), Lanteri y Cravetti (trabajos de madera), Carlos Caissón (yesería), Giuseppe Meliante (instalación eléctrica), Juan Colombo y Cía (pintura), Juan Bonasco y Spinozzi y Pelanta (instalaciones varias en madera), C. Y J. Silberman (muebles) y Casa Moriano (cortinados).
Luego de un año de febril
actividad se construyeron los
El diario “El Debate” en una
crónica del día 14 de octubre de 1928, al comentar la inauguración del Teatro
Coliseo señala: “...Hoy con orgullo de
muchos y para ostentación de nuestra ciudad, el hecho consumado adquiere
contornos que jamás se soñaron...”. Con la sala colmada de público
entusiasta comenzó la ceremonia inaugural con el Himno Nacional Argentino,
seguido de
Criterios de Valorización que justifican su declaratoria .
Constituye uno de los pocos
ejemplos de la tipología del teatro lírico italiano en
El conjunto arquitectónico,
emplazado en las calles 19 de Marzo e Independencia, está condicionado por dos
de sus lados a una construcción entre medianeras. El proyecto original,
incluía, además del Teatro Coliseo con acceso principal sobre la calle 19 de
Marzo, la sede social y salón de actos, que ocupan el primer nivel, y un bar – confitería en planta baja en relación directa con el
espacio urbano. Atravesando el pórtico, se ingresa al foyer
que da acceso a la sala. Esta sigue la tipología del teatro lírico italiano, en
ella la forma típica de herradura permite que todo el espacio vuelque sobre sí
mismo y pueda ser dominado desde cualquier punto, ya sea la platea, los palcos
altos o bajos, la tertulia y la galería. Su acústica ha merecido elogiosos
comentarios. En tal sentido, el diario “El Debate”, en su suplemento especial
editado con motivo del 50 aniversario de
El edificio, de definida influencia italiana, presenta una ornamentación austera. En fachada, las dos plantas que la conforman están tratadas con un almohadillado muy marcado y un importante zócalo sirve de base a toda la composición que culmina en un parapeto ciego, escasamente ornamentado. Por el contrario, los balcones de planta alta están perforados y este espacio ocupado por balaustres sobriamente diseñados. Cuatro
paños, ligeramente adelantados con respecto al plano de la fachada, están coronados por frontis triangulares con motivos alegóricos de referencia que, con marcada evidencia se elevan por sobre el resto de la composición. La loggia de planta baja y el importante balcón del primer nivel remarcan el acceso principal, situación reforzada por la presencia de una marquesina metálica que se extiende a lo largo del mismo.
A comienzos de la década de 1970, el afán de “modernización” arquitectónica que modificó edificios existentes sin respetar sus valores patrimoniales llegó, también, a Zárate y la fachada de este conjunto sufrió en el sector de la esquina correspondiente al bar – confitería, una desacertada modificación que alteró su sereno y armónico lenguaje.
En estos últimos años,
Fuente consultada: “Era una vez...Zárate” Arq. Silvia Baccino y María Luisa Sorolla. julio 1997.