Fundamentos de la

Ley 11380

 

            En el ámbito de la educación técnica es urgente colocar al futuro egresado en contacto directo con las máquinas-herramientas que se utilizan en la empresa de hoy, si queremos abandonar la producción seriada y generalizar una economía flexible.

            La empresa utiliza la robótica en los países industrializados, lo cual no ha generado desempleo como se sospechó al principio, sino que ha logrado promover inquietudes de perfeccionamiento en la mano de obra especializada, más aún, nuevos puestos de trabajo al aumentar y mejorar la producción.

            La robótica viene precedida del control numérico, que creemos indispensable introducir en forma masiva en los servicios educativos secundarios de modalidad técnica, de acuerdo con la especialidad, previa experiencia piloto.

            No es posible admitir pasivamente que sigamos teniendo nuevas promociones de técnicos y profesionales que ni siquiera conozcan la existencia e estas formas de tecnología, hoy generalizadas en el mundo laboral.

            De allí el desfasaje existente entre un egresado del sistema educativo y un aspirante a ocupar un puesto de trabajo en una empresa, que en verdad debieran tener un mismo perfil.

            Las máquinas -herramientas de control numérico- no se fabrican aún en el país,  pero el sistema de intercambio compensado, en el cual las compras se efectivizan mediante exportaciones que nivelan la balanza de pagos, hará posible su adquisición sin afectar el presupuesto provincial.

            Este mecanismo tiene el doble beneficio de promocionar la exportación de productos no tradicionales, captando nuevos mercados y de conseguir la incorporación de la nieva tecnología que permitirá competir internacionalmente con nuestros productos, en mejores condiciones.

            En cuanto a las dificultades iniciales para la utilización del nuevo instrumental, es bueno aclarar que los equipos incluyen los cursos de perfeccionamiento para la capacitación de los docentes, de modo que bastará con implementar un sistema conveniente de multiplicación para que nuestros docentes se encuentren en condiciones de transformarse en facilitadotes del nuevo recurso.

            Capacitar con tecnología de avanzada implica redimensionar el desarrollo industrial, y a fuerza de ser reiterativos, diremos una vez más que los destinados a educación no son gastos, sino inversiones, sobre todo si se solventan con recursos genuinos, que a la vez, benefician a otras aristas de la compleja situación económica que atravesamos.

            Por lo expuesto, solicitamos la aprobación del presente proyecto.