Fundamentos de la

Ley 11506

 

            Ningún hecho ha sido más relevante de la fragilidad de conocimiento científico como es la aparición, en las últimas décadas, del síndrome de inmune eficiencia adquirida (SIDA) y esta eclosión patológica, no solo ha conmovido la esfera asistencial sino los aspectos sociales, éticos y religiosos.

            El SIDA, enfermedad convertida ya en una formidable pandemia, trasciende el plano meramente médico para involucrar conductas, actitudes, afectos y destinos del hombre, su familia y su entorno socio-cultural. No obstante, la comunidad científica nacional e internacional no descansa y reformula métodos y estrategias a fin de encontrar los parámetros adecuados para luchar contra este mal.           

            Los terrenos en los cuales se trabaja son diversos. Nada se deja al azar.

            Desde los investigadores en sus complejos laboratorios a los consultores médicos. Desde los congresos y eventos mundiales hasta los pequeños grupos barriales de reflexión. Los medios de comunicación masiva, las ONG, el Estado Nacional y Provincial a través de sus programas de prevención y asistencia del SIDA, etc., todos son elementos válidos para desterrar o al menos acotar el terrible flagelo que ha penetrado en el cuerpo social.

            Entre tantas actitudes solidarias y de asumir responsabilidades ciertas, los legisladores debemos construir el marco legal que brinde los instrumentos necesarios para el desarrollo de una planificación coherente y una respuesta eficaz en lo atinente al SIDA y a la protección de la salud Pública. A tal efecto se ha construido, con esfuerzo y consenso de los Señores, integrantes de la Comisión de Salud Pública, un cuerpo legal acorde a las circunstancias que definen el momento actual.

            El presente proyecto de ley destaca la voluntad manifiesta para implementar medidas tendientes a la prevención y control de la infección por H.I.V. protegiendo mediante acciones coordinadas, al hombre y su grupo familiar, atendiendo con dignidad al enfermo y mitigando el impacto social que la enfermedad produce.